hace poco vinieron las típicas abuelas de testigo de jehova, os pongo en situación.
Vivo en un 6º piso y cada planta tiene 4 puertas para cada casa, venia del gym salgo del ascensor y me las encuentro llamando a la puerta de al lado, nos cruzamos la mirada y lo típico.
"Hola..."
total que abro la puerta de mi casa, me giro para cerrarla y empiezan.
"hola tal"
nada mas decir eso les suelto.
-"¿sois testigos de jehova"
las mujeres con una cara de alegría inmensa (parecía que Jesucristo al fin les había recompensado)
-Siii
Yo, asimilándolo en décimas de segundo les suelto
-Entonces nada, que os den.
Y cierro la puerta mientras se oía de fondo ("ayayayaya esta juventud")
Mi madre diciendo, "tal que así no se dicen las cosas" mi padre descojonandose.
A la semana vienen las mismas y llaman a todas las puertas menos a la mía y mi padre me dice
"joder, pues si que a surtido efecto"