Si los chinos, que tienen un sistema gubernamental en el que no tiembla la mano tomar medidas drásticas o poco éticas, y que son económicamente y tecnológicamente los putos amos, no pueden frenar la expansión del virus pese a todo el esfuerzo realizado, ¿quién va a poder?.
Si el epicentro llega a ser cualquier país menos desarrollado, ahora mismo pensad cómo estarían las cifras de infectados y el índice de mortalidad.
Es cuestión de tiempo que esto nos llegue, aunque por suerte tenemos un sistema de salud bastante puntero. Y contando en que no mute el virus a una forma más peligrosa y potencialmente mortal en poco tiempo, cosa que es posible.