Antes de nada aclarar que este tema será serio y buscará reflexionar sobre el tema de Dios desde un punto de vista un pelín distinto a como estamos acostumbrados en este foro, ya que lo de creer en Dios o no creer en Él se ha convertido en una pregunta recurrente por parte de los foreros, separando a la comunidad mediavera en tres bandos distintos, agnósticos, creyentes y ateos, dicho a grandes rasgos. En un primer momento pensaba abrir el debate en el subforo de ciencia, ya que lo que se va a hacer es una similitud entre Dios y el universo en su conjunto, pero al tratarse de una idea tan mundana y común para todos me parece que será más enriquecedor charlarlo en Off-Topic (si los trolls nos lo permiten).
Esta idea del hilo surgió con un debate previo dado en los comentarios de Youtube sobre un vídeo de cosmología, y aquí lo que pondré será mi respuesta y mi reflexión al respecto desde hace ya unos cuantos años.
Siempre que surge el bucle sempiterno sobre si defender la existencia de Dios o negarla, queda claro que las diversas reflexiones con las que un individuo intenta alardear de conocimiento y seguridad sobre conceptos complejos, siempre se peca por la misma simplificación habitual en esta región del mundo.
Ya que vamos a buscar un nuevo intercambio de ideas al respecto, antes vamos a tener que difuminar esas barreras conceptuales que siempre mancillan el razonamiento de los que se atreven a expresarse con seguridad.
Aquí no se está tratando de un dios de connotaciones religiosas, sino de una entidad (en la definición más amplia de su significado) omnipotente que de él emana la existencia del todo, el problema está en la terminología que se mueve cuando se hablan de estas cosas. Hagamos un ejercicio de reflexión y contemplemos las virtudes y cualidades de el complicado concepto de Dios, basándonos solo en la idea como un máximo de principio del todo, dejando a un lado la religiosidad casi simbiótica:
-Dios es omnipotente, porque lo puede hacer de todo, incluso aquello que nos resulta paradójico, contradictorio o incomprensible para el razonamiento en sí.
-Dios se crea así mismo, por lo que es el principio que no necesita de un antecesor para su propia realidad.
-Dios es omnipresente, por lo que tiene la cualidad de verse introducido en cualquier plano de la existencia.
-Dios es inmortal y eterno, por lo que su fin no está determinado y en ningún momento perecerá, aparte de que su existencia va más allá de la concepción mundana del tiempo, lo que implica que ni siquiera se podría medir su longevidad al no existir un contador preciso para los elementos metafísicos.
-Dios es el encargado de atribuirle alma, espíritu y/o consciencia a todos los seres vivos, por lo que la fortuna de conocer la propia existencia y, a su vez, de tener la capacidad de disfrutar de la vida misma se debe a su generación de individualidad.
Ahora que sabemos bien las características que comparten las distintas culturas humanas sobre la entidad de Dios, parémonos a analizar las características que, sin duda, conocemos o consideramos que son propias del universo:
-El universo es, aparentemente, omnipotente, ya que permite fenómenos físicos que violan la propia coherencia del cosmos a ojos del ser humano. Manifestaciones que se pueden percibir en el mundo cuántico y en otros elementos cósmicos como son los agujeros negros. Qué decir del resto de cuerpos y fenómenos físicos, químicos y biológicos que se producen dentro de su propia totalidad, generados por el equilibrio absurdamente perfecto que se puede medir en toda emanación física.
-El universo se crea así mismo, tal y como apuntan todas las teorías que conciben el Big Bang como inicio de todo, que son la gran mayoría, por lo que el universo es lo único que con conocimiento empírico se le puede atribuir el poder de surgimiento espontáneo sin un motor trascendente.
-El universo es omnipresente, ya que todo el cosmos es él en sí mismo, por lo que se extiende a todas partes y está en todo y todo pertenece a su cuerpo interno, además de que no hay un más allá del universo porque, según las suposiciones científicas, el universo no se expande sobre algo que le de soporte, ya que más allá de la dimensión del espacio-tiempo no hay nada, ni siquiera vacío.
-El universo tiene un futuro incierto pero ya son varias las teorías que postulan que el fin del universo no sería más que un paso para que se regenere de nuevo en otro evento cósmico de proporciones inimaginables. Más allá de ello también ha surgido la teoría de Penrose de que el universo es cíclico y que lo único que hace es repetirse indefinidamente, en un ciclo eterno que se libra del origen y del final del mismo.
-El universo ha conseguido, según muchos a través del azar, la consagración de la vida inteligente, a través de un fenómeno desconocido que convirtió materia inerte en serios vivos y, por si fuera, sabemos que al menos los humanos tenemos consciencia y podemos experimentar la vida más allá de lo que se puede ver en especies de cerebros menos desarrollados, pero la consciencia sigue sin tener explicación en sí y apenas es posible definirla, por lo que está más en el campo de la metafísica que en la física, al menos por ahora.
Ahora bien, decidme las diferencias que hay entre Dios y el universo, ¿que uno es la palabra que usan los religiosos y el otro la que usan los científicos? Porque aparte de eso comparten todas las similitudes y, en esencia, parecen ser la misma cosa. Cierto es que cuando uno piensa en Dios sin los prejuicios religiosos lo sigue considerando como si se tratara de una entidad creadora que ha obrado más allá de nuestro entendimiento, mientras que el universo se visualiza más como una realidad azarosa que es así pues porque la estadística y la probabilidad inherentes a la naturaleza permitieron que fueran así.
Llegados a este punto podríamos considerar como un mandato personal demasiado caprichoso rechazar la figura de Dios o, mejor dicho, demasiado influenciado por nuestra cultura occidental, en donde la deidad monoteísta siempre reflejó una figura paterna personal que fue humanizada por los escritos seculares, muy distinta a las concepciones metafísicas que se dan en Asia, donde el cosmos o la energía del todo suponen el alfa y el omega en un equilibrio trascendental con inmanencia en lo terrenal.
La conclusión a la que uno puede llegar con esto es que los ateos son, en su gran mayoría, personas que odian la religión y por ende rechazan a Dios, ya que son incapaces de diferenciar el dios católico (por poner un ejemplo) al dios conceptual. Esta deducción podría considerarse como evidente, pero no es la primea vez que oigo o leo la opinión de un ateo y, en multitud de ocasiones, se dedican a hacer referencia directa a las características propias de las deidades religiosas, no a la idea de Dios en sí. Por otro lado, todos aquellos que miran con recelo a la idea de Dios porque la consideran demasiado fantasiosa o extraordinaria creo, en mi humilde opinión, que no son conscientes de lo asombrosa que es la realidad en su conjunto, cuanto más se adentra un individuo en el pleno conocimiento de aquello que nos rodea más picajoso se vuelve el asunto, todo está demasiado bien hecho, el equilibrio medible entre los contrastes físicos, los desajustes (que parecen haber sido deliberados) en fenómenos cosmológicos que permitieron que todo siguiera su curso, las constantes físicas y las propiedades cuánticas que posibilitan todo y que son así pues porque son así (expresado de esa manera por estudiosos del tema) y, en definitiva, la ABSURDAMENTE MINÚSCULA PROBABILIDAD con la que se produjo y con la que se ha sustentado la realidad, a lo que hay que añadirle la individualidad consciente de todo individuo que le da un sentido a toda la complejidad física que se ha originado. Asusta cuando uno reflexiona sobre ello.
¿Estamos ante una discusión conceptual absurda? Si la idea de Dios es tan inabarcable y complicada, ¿sería posible que el propio cosmos sea el Dios que tanto han rechazado los escépticos? ¿No se entra en una contradicción cuando se rechaza a una entidad como Dios cuando, literalmente, vivimos en una realidad que comparte todas sus características?
Tal y como afirman muchos estudiosos y académicos, ¿nos estamos moviendo lentamente a un estándar filosófico que acabará aunando la teología con la ciencia?
¡A debatir!
P.D: No habrá RPV, si no te interesa el tema no lo leas.
P.D. 2: A ver si sale un debate productivo e interesante de esto que seguro que se produciría en el subforo de Ciencia, espero que Off-Topic no me defraude.
P.D. 3: Puede que haya metido la pata en alguna afirmación sobre física, tampoco soy 100tífico, pido disculpas de antemano.