Sigo contando algunas curiosidades y anécdotas de hostelería pero esta vez centrándome en camareros:
-Siempre, en todos los locales, hay una guerra no escrita entre cocina y sala. Es imposible evitarla. Yo lo intenté por todos los medios dada mi experiencia en muchos otros restaurantes y simplemente, pasa. A veces porque los camareros tienen razón, otras porque no la tienen... pero siempre termina sala y cocina enfrentada.
-Solía encargarme de abrir el restaurante a las 10 para empezar a trabajar en cocina y normalmente el jefe de sala llegaba sobre las 12, empezando el servicio a las 13pm. Los cocineros abríamos, los camareros solían cerrar porque las mesas se quedan de sobremesa hasta más tarde de lo que cierra cocina. Al llegar me encuentro que había un camarero encerrado porque antes de irse había ido al baño y nadie se había dado cuenta. Tuvo que dormir en uno de los sofás del salón de dentro y no pudo ni ducharse porque entraba a trabajar en 2 horas.
-Tuve que enseñar a unos de los camareros novatos a hacer café en la cafetera porque después de 2 meses el jefe de sala no le había explicado ni como prensar el café, ni como hacer crema de leche, ni siquiera como se sacaba agua calienta para hacer un té. Es lo malo del "sistema inglés" que teníamos instalado, que un camarero de barra siempre se encargaba de las bebidas pero si un día faltaba por cualquier razón, había gente que no sabía ni por donde les venían en su puesto.
-El mismo jefe de sala robaba botellas de vino constantemente. Era un enólogo que encontró en aquél restaurante una forma sencilla de probar muchos vinos gratis. Mis jefes eran tan inútiles a nivel de gestión que yo, como jefe de cocina, me tuve que hacer cargo de casi todas las cuentas a nivel de contabilidad y administración pero el jefe de sala lo que hacía era aprovecharse de ese desconocimiento y hacer pedidos completando cajas de vinos normales con botellas muy caras. Una semana lo vi llevarse en la mochila 1 botella de Vega Sicilia que rondaría los 100€ a precio de proveedor.
-Este mismo jefe de sala no sabía organizarse las reservas. Era un crack en protocolo, vinos y presencia pero un desastre organizando y dirigiendo. En la navidad tenía que hacerme yo un cuadrante gigante con las reservas, confirmar los mails y gestionar todo porque si no no sabía lo que tenía que pedir para cocina y nos hubieran dado mucho por culo.
-Un día uno de los camareros estaba tan quemado del servicio y de un jefe hijo de puta que tuve que se encendió un cigarro en medio del salón a las 10 de la noche, con todas las mesas llenas. La reacción de la gente fue, sorprendemente, tan criticada como aplaudida.
-Una vez me vino un camarero diciendo que le repitiera el plato porque se le había caído al suelo. Se lo repetimos y volvió diciendo que se le había vuelto a caer. Mosqueados se lo repetimos por tercera vez y el muy subnormal volvió a tirarlo.
-Lo que más me he encontrado en el gremio de camareros son a gente que ha estudiado arte dramático. Es super curioso, pero debo haber conocido a 8 personas distintas, en diferentes comunidades, con edades distintas que han hecho arte dramático y eran camareros por necesidad.
-Una vez tuve que pedir a un camarero que me ayudara a bolear croquetas porque ellos no tenían trabajo y nosotros teníamos muchísima faena. A los 20 minutos lo eche de la cocina porque estaba jodiéndonos más que ayudándonos. Y mira que es fácil hacer una bolita de croqueta.
-En un restaurante SI se mira que los camareros tengan buena imagen y por muy mal que suene, en muchos casos, a las chicas se les exige que lleven ropa ajustada y se insinúen constantemente. No os imagináis la cantidad de clientes que pueden elegir tu restaurante en lugar de cualquier otro solo porque haya una camarera con un culo increíble y lleve mayas ajustadas.
-En uno de los locales donde trabajé les metieron una multa por tener música sin pagar derechos de autor y la policía se enteró de esto porque el autor de la música fue a cenar a ese local en el momento que sonaba su canción xd. Fue con el grupo El Bicho y se de buena tinta que no los atendieron muy bien.
-Tuve que enseñar a un camarero a doblar cartón porque en lugar de doblar las cajas y llevarse un viaje con un carro de la compra, se hacía 20 viajes con las cajas abiertas que ocupaban 10 veces más. Se pasaba 1 hora todos los días sacando cartón hasta que me di cuenta de esto.
-Uno de los camareros que trabajó conmigo se hizo una quemadura de tercer grado porque se tiró en los pies un soporte con fuego de una raclette de queso fundido. Se quemó el calcetín de tal forma que se le quedó pegado a la piel de pie y lo atravesó completamente. Gritando como un gorrino tiró del calcetín y se arrancó la piel de golpe. Se desmayo y tuvimos que cerrar el local esa noche del espectaculo.
-Tuve una camarera que era tan bajita que no podía apilar más de 4 cajas de cerveza, una vez intentó subirse a otra caja para apilar 5 y se hizo un esguince de tobillo que resultó en una baja de 2 meses.
-Menos en uno, en todos los restaurantes donde he trabajado me he acostado con alguna de las camareras. Mi mejor strike fue con una brasileña de 28 años de muy muy buen ver. No se que pasa, que siempre hay una camarera buenorra y suele estar soltera.
-En uno de mis primeros trabajos al salir de la escuela de hostelería, haciendo de extra en un salón de banquetes, uno de los camareros se quedó embobado viendo como era capaz de marcar en una plancha 75 solomillos de cerdo al mismo tiempo.
-Me he encontrado a un camarero comiéndose el hueso de un jamón a bocados en el cuarto de la limpieza.
-Una camarera vino a pedirme ayuda al pase de cocina porque había 2 clientes follando en el baño de mujeres y hacían muchísimo ruido. Según ella llevaban ya más de media hora y se habían quejado varios clientes.
-Tuve un camarero que no sabía la diferencia entre una escoba y una fregona, verídico. Un chaval de 19 años que no había estudiado ni trabajado en su vida, niño de mamá. Duró poco allí.
-Los camareros siempre se quejan de la comida que se prepara para el personal. Siempre, aunque te digan a la cara que está todo muy bueno.
Continuará en otro ratico...