Markus Sell, de Jonschwil en Suiza, hizo un invento muy insólito, al que llamaremos… coche-moto. Y es que montó la parte trasera de un coche en una motocicleta.
Los asientos no es lo que más llama la atención, es más bien el hecho de que estaba llegando hasta 112 km/h. Sin embargo, su primer viaje se truncó cuando él fue detenido por policías de tránsito.
La policía inmediatamente lo detuvo, aparte del exceso de velocidad, no era algo claro lo que estaba conduciendo, pero además estaba violando varias leyes de una sola vez.
Un funcionario dijo que no estaba seguro de lo que era, si un coche o una moto. Aseguran que aunque el chico tiene mucho talento y es un buen mecánico, debe atenerse a las pistas de carreras.
El chico, sin duda tiene una mente ingeniosa, la pregunta es ¿cuál será el siguiente invento que se le ocurra?
http://www.planetacurioso.com/2011/06/25/coche-moto-un-invento-curioso-por-un-chico-de-17-anos/