Varios coches quemados como resultado de los disturbios perpetrados por jóvenes musulmanes
La pequeña ciudad holandesa de Ede se ha visto sacudida esta pasada madrugada por una serie de actos vandálicos cometidos por jóvenes de origen árabe y magrebí.
Los jóvenes se dedicaron a quemar aleatoriamente los coches aparcados en la calle sin que se pudiese hacer nada para detener las llamas.
En la localidad la tensión es palpable en el ambiente. El alcalde, el progresista Cees van der Knaap, quien desde el principio de la irrupción de los llamados refugiados en Europa ha hecho una intensa campaña para introducirlos en la pequeña localidad, se ha visto obligado a suspender la asamblea de la ciudad. No es la primera vez que el pequeño municipio se ha visto sacudido por la violencia provocada por extraeuropeos, pues durante la Nochevieja ocurrieron hechos similares y por los cuales nadie fue detenido.