China frena la venta de materias primas y deja a España sin pintura
Muchos son los sectores que miran hacia Asia esperando que lleguen las materias primas para poder trabajar, algo que en la industria química, y en concreto en la pintura, ha dejado de ocurrir. Las primeras alarmas se encendieron a finales del año pasado pero fue a lo largo del primer trimestre de 2021 cuando la presión comenzó a ser asfixiante. Hoy hay una escasez muy grande de productos básicos y los que llegan lo hacen subidos en una ola de especulación enorme.
El problema comienza a surgir cuando China decide que su país (y algún otro del entorno) necesita prácticamente todo lo que allí se produce. Es entonces cuando las exportaciones caen. "Asia no exporta nada de producto porque dicen que están creciendo", dice David Romero, consejero delegado de Global Paint, una empresa situada en Cáceres. "Siempre hemos vivido especulaciones, pero ahora afecta a todas las materias primas porque China se está quedando con todo", añade Manuel Roldán, director general de Nupinsur, en Jaén. La situación, lejos de mejorar, es peor a cada día que pasa. Además, según estos protagonistas, no tiene visos de resolverse a corto plazo.
Los productos que más faltan, y que además son esenciales para fabricar las pinturas, son la resina epoxi, el disolvente o el isocianato. Este último ha tenido una subida de precio del 100%.
También el transporte. Por problemas marítimos, los container se hacinaban en los puertos de China sin que hubiese barcos que los recogieran. "El resultado fue que el transporte de un solo contenedor pasó de 1.500 dólares a 7.000", explica Romero.
La escasez de materias primas que provoca la falta de exportación china se une a la escasa producción que existe en Europa. Una de las principales razones, según dice Roldán, es que la producción de muchos de los materiales que se necesitan para hacer las pinturas son contaminantes, motivo por el cuál se dejaron de hacer.
La situación de estos dos directivos en sus fábricas es de ahogo. "Estamos haciendo malabares para no parar la producción pero hay líneas en las que no ha habido otro remedio. Hoy no podemos cumplir todos los pedidos pero estamos aguantando. Prevemos conservar el empleo pero las cuentas de resultados se están deteriorando y este año haremos menos inversiones", explica Romero.