“Llega siempre tarde… A no ser que un toro corra hacia ti”. Esta frase, con más tópicos que palabras, es la que hace las veces de pie de foto en un artículo que esta semana está dando vueltas por las redes sociales. "Cómo ser español", publicado por el diario británico 'The Times', condensa a modo de guía los pasos a seguir para mimetizarse en España como un auténtico local. A saber: ser impuntual, gritar y ser un maleducado.
"Aprender el idioma es solo el primer paso. Conseguir un bronceado y saber distinguir las 'tapas' de los 'pintxos' son el segundo y tercer paso, pero todavía te queda un largo camino antes de que puedas pasar a ser algo más que un guiri”, comienza explicando Chris Haslam, quien firma el artículo. En su perfil de 'The Times' pueden verse otras de sus piezas dedicadas al mundo de los viajes, algunas con el mismo tono de parodia que se aprecia en "How to be Spanish".
Lo que hay que hacer según las costumbres españolas es entrar a un bar besando y abrazando a todo el mundo, gritando "oiga" al camarero o tirando al suelo cualquier cosa que no se pueda beber o comer. “También puedes tirar el por favor y el gracias” (...)
Para ser español, también es necesario hablar faltando al respeto. Así lo cree Haslam, que asegura que hay que "desbloquear esa boca sucia" porque el español está lleno de obscenidades, sin importar el interlocutor. (...)
El autor recurre al enésimo tópico: hay que llegar tarde. “Llegar 30 minutos tarde a un sitio es considerado muy pronto y muy grosero”, apunta.
También se especifica lo que hay que comer para convertirse en un verdadero español. "No puedes pedir mantequilla, este es un país de aceite de oliva. Y para lo que estés haciendo a las 11 de la mañana y pilla una cerveza y un sándwich", escribe. Eso nos permitirá aguantar, asegura, hasta que lleguen las dos de la tarde y vayamos a comer un menú del día que habrá que degustar en, como poco, tres horas. "Luego, échate una siesta".
“Las tapas se comen de pie en el bar gritándole al camarero”, dice volviendo a una de las primeras lecciones que aprendíamos. Aquí, quien no grita no es español. Tampoco quien come sentado a una mesa. Para la hora de cenar, el periodista recalca: “Recuerda comerte todo lo que hayas pedido. Los países que han sufrido hambruna son graciosos en este sentido”.
Haslam termina el artículo dejando un par de lecciones más: no dar mucha propina y ser ambivalente en cuanto a los toros. "Recuerda llevarte tu teléfono al baño para poder hablar con tu amante", concluye.