Se había empeñado Juan José Padilla en banderillear al astifino cuarto, cinqueño como la corrida completa, fino también de hechuras. De nombre 'Marqués'. Apretaba y cortaba mucho.
En el último par, de dentro afuera, al sesgo, con la querencia de toriles en la salida apretó una barbaridad. Padilla cayó en la misma cara y el toro derrotó abajo con su precisión y no dio tiempo a ver más. Las siguientes imágenes eran de su cara reventada. Sangrando por el ojo a borbotones. El pitón había entrado por debajo de la mandíbula. Y salía, o eso parecía, por la órbita del ojo. "No veo, no veo", decía camino de la enfermería.
Los rostros de sus compañeros reflejaban el terror. La gravedad del percance. Lo trasladaron de urgencia al Hospital Miguel Servet. Muy duro, muy duro. El resto de la corrida ya daba igual. Abellán, llorando, pasaportó a 'Marqués', sin más, con el cuerpo descompuesto y las lágrimas cayendo por las mejillas. La tarde quedaba partida como el rostro de Juan José Padilla. No importaba lo que había pasado antes ni lo que pasaría después.
Parte médico: El doctor Val-Carreres ha informado de que Padilla sufre una "herida por asta de toro que le ha producido un grave traumatismo craneofacial con lesión del aparato auditivo y del ojo izquierdo. Ha sido trasladado intubado y su estado es muy grave".
Fuente: elmundo.es
Secuencia de fotos: http://www.elmundo.es/multimedia/?media=gGznC2s4T6G
¿Hasta cuándo?