Una de las víctimas imaginarias se desmoronó cuando vio que sus mentiras habían llegado demasiado lejos. Ella y otra adolescente habían acusado falsamente a dos amigos de haberlas raptado y violado. Los chicos fueron detenidos y llegaron a ingresar en el presidio de Albolote. Consciente de que había contribuido decisivamente a meter en la cárcel a dos inocentes, una de las jóvenes contó la verdad al juez de Instrucción que investigaba los hechos: todo era mentira. No hubo secuestro ni agresión sexual. Se inventaron la 'película' para evitar «represalias familiares» por su tardanza a la hora de volver a casa. Y no se les ocurrió otra cosa que señalar, precisamente, a los amigos con los que habían estado. «No quiero que por mi culpa estén en prisión», dijo la muchacha que se arrepintió al magistrado.
Liberación «inmediata»
Cuando habían pasado 24 horas desde el ingreso de los jóvenes en el penal de Albolote, el juez se apresuró a dictar un auto en el que ordenaba la «inmediata» puesta en libertad de las verdaderas víctimas del embrollo.
En su resolución, el magistrado dejaba claro que él en realidad nunca las había tenido todas consigo. En este sentido, recordaba que una de las chicas declaró que se había fumado un porro después de la presunta violación, una actitud que el instructor consideraba incongruente.
También dijeron que habían estrellado una botella en la cabeza de uno de los supuestos secuestradores, pero éste no tenía ninguna lesión.
Todo el relato estaba salpicado de agujeros e incidentes fantasiosos. Según aseguraron en su día las chicas a los investigadores, en el inmueble en el que estuvieron secuestradas -una casa abandonada del Albaicín- había otra mujer, de origen árabe, también retenida a la fuerza. Y entre los malos destacaba un individuo negro que decía pertenecer a una familia real africana... Demasiada literatura.
En resumen, que las acusadoras pasaron a ser acusadas y, como eran menores, quedaron a disposición de la Fiscalía especializada en la materia.
Juicio
El juicio estaba fijado para ayer, pero no fue necesario que se celebrara la vista oral. Las dos chicas aceptaron la condena que proponía el Ministerio Público por la comisión de un delito contra la administración de justicia: ocho meses de libertad vigilada para cada una, un tiempo durante el que tendrán que cumplir una serie de objetivos educativos, sociales, etc.
(http://www.ideal.es/granada/prensa/20070627/local_granada/chicas-reconocen-fingieron-violacion_20070627.html)
Pero serán *****
No sé vosotros, pero yo creo que hay ciertas cosas con las que no se juega, a saber: 112, gastar bromas a gente mayor, malos tratos y violaciones...
RPV: Dos chicas se inventaron que sus amigos las habían violado para evitar una bronca de sus padres por llegar tarde a casa. Las cosas se torcieron y sus amigos han llegado a estar en la cárcel... pero finalmente una de ellas ha confesado que todo era mentira, así que ellas que pasarán 8 meses en libertad vigilada.