Las juntas de tratamiento de las cárceles en las que se encuentran los presos del ‘procés’ volvieron a proponer el tercer grado para los dirigentes después de que la anterior fuera revocada a principios de diciembre por el Tribunal Supremo. La nueva propuesta tenía un plazo de dos meses para ser ratificada por el departament de Justícia, pero apenas ha tardado 14 días. La conselleria que dirige la republicana Ester Capella ha dado el visto bueno a ese tercer grado y los reos podrán salir de prisión este mismo viernes, a punto para comenzar la campaña electoral que comienza en Catalunya.
Además, las resoluciones que conceden el progreso de grado a los presos también tienen en cuenta que, “en todos los casos, existe una red social y familiar favorable para la rehabilitación, junto con un pronóstico de bajo riesgo de reincidencia”.
De esta forma, el Servei de Classificació recuerda que además de los años de la pena, para la progresión de grado hay que tener en cuenta otros factores, como la conducta y el nivel de adaptación de los penados al centro penitenciario, las condiciones de su red social y familiar, la capacidad de reinserción social y laboral, si tienen o no antecedentes penales, el riesgo de reincidencia y el tiempo cumplido en prisión.