#232 No te confundas, otra ves pones en mi boca cosas que no he dicho tratando de invalidar mi argumento.
Soy historiador y como tal desde siempre he considerado necesario ahondar en los esfuerzos de investigación de una etapa de nuestra historia tan importante en nuestro desarrollo actual como sociedad democrática. Antes de la la pandemia, de la crisis y de cualquier elemento contextual que se use para desplazar algo que nada tiene que ver.
Vuelvo a lo mismo, si a mi mañana me mata un virus, independientemente de que se haya podido hacer más o menos por mi vida (que espero que sea lo máximo posible y si no se tomen medidas) el que me ha matado es el virus. Yo tendré mi nicho, con mi lápida y mis familiares podrán ir aunque sea a ponerme unas flores. Es más, si en mi deceso ha colaborado la negligencia o inacción de otra persona son libres de reclamarlo a la justicia y que esta haga su función.
A los que les pegaron un tiro, pegase el tiro un nacional o un rojo, y los tiraron en una cuneta, nadie les ha podido poner flores, durante 40 años la justicia los ignoro y durante otros 40 años casi que lo mismo. Sus familiares fallecieron sin entender por qué alguien, una persona común y corriente como tú, te mete en un camión y te pega un tiro.
Hasta donde yo se los virus no antienden a motivos, no respetan cuestiones éticas ni morales, por no hacer no hacen ni las funciones vitales. Solo se reproducen y si para ello tienen que matar matan, a uno o a un millón, a todos los que puedan para reproducirse más y más porque eso es lo único para lo que existen.
Lo que hace una mala gestión no es matar más gente, es no hacer que el virus mate menos gente. Porque el que hace que te fallen los pulmones, se te pare el corazón y te mueras no es el señor presidente por incompetente que sea, que lo es. El que aprieta un gatillo porque alguien se lo manda, por cuestiones ideológicas o políticas y tira a alguien en una cuneta si está matando. Porque es la bala la que hace que mueras y esa bala sin nadie que apriete el gatillo no es más que un trozo de cobre y plomo inerte.
Ahora bien, puedes seguir comparándolo, puedes seguir comparando la incompetencia de un administrador público elegido por la ciudadanía con el asesinato sistemático de rivales durante y después de una guerra civil (por ambos bandos insisto) a nivel ideológico.
Puedes seguir creando espejos argumentales trucados para tratar de engañar a alguien sobre tus intereses la hora de argumentar y de paso puedes seguir vertiendo falacias sobre lo que escribo. Nada de eso te va a dar una razón que no tienes.