"Al ver que se trataba de una persona de rasgos magrebíes e inducido por su delirio" —en palabras del jurado que lo juzgó—, sospechó que era un terrorista y comenzó una persecución que acabó con la vida de Slinanni. Una persecución que cesó tras dispararle 11 veces por la espalda, propinarle una "inhumana" paliza y pegarle un tiro en la sien para rematarlo, según el Tribunal Supremo, que acaba de confirmar la pena de 14 años dictada contra el agresor.
https://elpais.com/ccaa/2019/02/21/madrid/1550745137_338897.html?id_externo_rsoc=FB_CM
La locura racista puede llevar a casos como este. Qué barbaridad. Y el comodín de la enfermedad mental no podía faltar en la condena.
¿Os parece justa una condena de 14 años de prisión teniendo en cuenta el ensañamiento con la víctima?