#166 En este mismo caso tienes ejemplos de como empresas privadas se lucraban de suculentos acuerdos publicitarios que sobrepasaban por mucho el coste normal de publicitarse, lo que es un evidente pago encubierto por otros servicios. Las grandes constructoras de nuestro país, todas ellas privadas, desangran a la administración con surrealistas sobrecostes en sus obras y acuerdos abusivos que incluyen indemnizaciones en caso de que no obtengan los beneficios estimados (tócate los huevos, invierten sabiendo que si no ganan les pagan para que seguro que ganen). Las eléctricas, todas ellas privadas, tienen a decenas de políticos entre sus "asesores" lo que les garantiza mantener el oligopolio.
Como digo, no creo que sea un problema de la empresa pública, sino un problema generalizado de estado corrupto. Tu post insinuaba, aunque no lo afirmabas directamente, que si el canal Isabel II fuera privado esto no habría pasado, y no estoy de acuerdo, el político corrupto siempre va a tener donde hacer chanchullos, sea en empresa pública, privada, en ayuntamiento o en cualquier administración pública.