Jordi Sànchez y Jordi Turull han empezado esta misma mañana una huelga de hambre indefinida como protestaa contra el bloqueo del Tribunal Constitucional ante sus recursos, que les impide acudir al Tribunal Europeo de Derechos Humanos (TEDH). El TC ha admitido a trámite todos los recursos de dichos presos pero no ha resuleto sobre ellos, así que no se puede impugnar su resulado (fuese cual fuese) a instancias europeas.
“El acceso a los tribunales sin dilaciones ni trabas innecesarias es un derecho que toda persona tiene. Dificultar el ejercicio de este derecho con plenas garantías y en condiciones justas puede conllevar perjuicios y daños irreparables a derechos fundamentales”, denuncian en el texto. “Las vulneraciones del Convenio Europeo de Derechos Humanos y del Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos son bien visibles en muchas de las resoluciones que tanto el Tribunal Supremo como la Audiencia Nacional han dictado contra nosotros desde el 16 de octubre de 2017, fecha en que se produjeron las primeras órdenes de prisión preventiva”.
Esta iniciativa es uno de los resultados de bastantes conversaciones entre los presos preventivos, pero ante la diferencia de opiniones sobre qué hacer, Sànchez y Turull han iniciado la huelga de hambre y los otros presos se planten otras acciones. Durante esta huelga de hambre, solamente tomarán agua, estarán obligados a acudir al comedor a las horas que corresponda y se les hará un seguimiento médico.