#194 Obviamente, a dia de hoy, existe, gracias a Dios (o gracias a nosotros mismos que hemos luchado, como individuos por conseguirlo), cierta libertad a la hora de elegir, bien nuestra moral, bien nuestra tendencia sexual (más bien elegir hacer publica nuestra tendencia sexual), bien lo que sea. Pero tampoco nos engañemos, que no todos estamos capacitados para poder crear y definir nuestra propia moral y, si nos repiten dia a dia esto es malo, esto es raro, esto es una desviación, ciertas personas son incapaces de formular una opinión propia y, por desgracia, basan esta en el odio y el desconomiento.
El ejemplo más claro lo tienes en Chueca (Madrid). Mucha gente de fuera tiene una imagen de ese barrio más parecida a Sodoma y Gomorra que a la Realidad, donde los gays van en tanga, se frotan en aceite unos a otros en medio de calle, estan como locos esperando a que un heterosexual cruce la primera calle y entre en este barrio para violarle contra su voluntad, e impera la ley de la pastilla de jabón. La realidad es totalmente opuesta, y cada vez son más los heteros que salen por esa zona a tomar copas, y a las fiestas, que para quien no haya ido, es una de las mejores fiestas de barrio de todo Madrid. Y no, no soy gay y he ido, de la misma manera que me he encontrado con bastante gente de mi barrio que tampoco es homosexual, y estaban allí. ¿Que hay pesados que se toman dos copas y te darán la brasa? Hombre, ¿Nadie ha visto nunca en un bar como un pesado le da la brasa a una amiga vuestra? es más, ¿Nunca habeis estado con vuestra novia comiendoos la boca y en cuanto habeis ido a por una copa y habeis girado la cabeza, habeis visto al tipico pesado dandole la tabarra? porque a mi me ha pasado, y un par de veces.
Que yo sepa, a nadie se le educa para ser gay, es más, se suele educar a no serlo, así que, partiendo de esa premisa, la inmensa mayoría de comentarios aquí, pierden toda su razón.
#195 Es que en estos temas, sacar la moral, y demás, cuando los padres de nuestra moral practicaban la bisexualidad y se subian a un palco a exponer sus teoría filosóficas con la única finalidad de llevarse a la cama a jovenzuelos, es un poco hipócrita, la verdad. Pero bueno, que se le va a hacer.