Me parecería más relevante el número de parejas de años y años que se rompen antes de llegar a formar familia. Porque parejas sigue habiendo un montón, lo que me parece que ha cambiado más es lo fácil que se rompen vínculos largos.
En mis círculos la cantidad de parejas de 10 o más años que se han roto por motivos de quinceañero es alarmante (llegando al nivel de caso en el que uno de los dos llegó a los 30 y decidió que era ahora o nunca y quería aprovechar a salir y desfasar los últimos años de "juventud" que le quedaban antes de formar una familia) y afecta mucho a cómo te tomas las relaciones después.
Si con 30, 30 y poco dejas una relación de una década, la percepción de la estabilidad y los planes de futuro cambian bastante a la hora de determinar si firmas en papeles el hacer inversion de vida conjunta.
En mi entorno cada vez hay más parejas juntas pero no revueltas, lo cual es terrible para la economía de ambas personas y la idea de formar familias.