Un terrible suceso acaecido ayer en Sanchinarro (Madrid) ha vuelto a poner de manifiesto que aún queda mucho camino por recorrer en materia de concienciación de tráfico. La conductora de un BMW de alta gama, una mujer de 30 años, está acusada de un delito de homicidio imprudente tras atropellar a dos viandantes... pero no solo eso. Sin carnet, borracha y con un menor
Porque la mujer también conducía bajo los efectos del alcohol (duplicó la tasa máxima permitida en las primeras pruebas) y de hacerlo sin tener permiso. Y, por si todo esto fuera poco... con su hijo de doce años en el interior del vehículo.
Su acompañante, un varón de 42 años, no se irá 'de rositas' ya que ha sido acusado de cooperador necesario al no evitar que la conductora tomara el control del vehículo sin estar en condiciones (ni físicas ni 'administrativas') para hacerlo.
Se da la circunstancia de que el atropello no sucedió en la calzada de la vía, sino en la misma mediana, donde se encontraban las dos mujeres. El coche invadió el espacio peatonal e impactó contra las dos mujeres, que se desplazaron hasta a 20 metros del lugar del atropello como consecuencia del golpe.
Los servicios de emergencia de Madrid (SAMUR) acudieron de inmediato a la Avenida Ingeniero Emilio Herrera y practicaron maniobras de reanimación a las dos mujeres, pero no pudieron hacer nada por salvarles la vida.
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