Vengo a comentar algo que me llamó bastante la atención sobre la forma de trabajar de varias inmobiliarias en Valencia, aunque según tengo entendido esto se hace por todo el país.
Recientemente tuve la oportunidad de ver desde dentro el funcionamiento de dos oficinas de Expercasa (Mislata y Quart de Poblet) en Valencia y su forma de trabajar me dejó bastante perplejo.
¿Cómo trabajan?
Dividen su trabajo en 3 áreas. Por un lado lo que llaman "hacer zona", por otro "desarrollar" y por último lo que todos conocemos como las visitas a pisos y el papeleo típico.
1. Hacer zona
Básicamente, cada oficina se atribuye una zona de actividad que suele ser una población/localidad o en su defecto un barrio en el caso de grandes ciudades.
Cada localidad se divide en zonas que se "entregan" a un comercial. Los comerciales patean su zona fijándose en portales, fachadas, terrazas y cualquier indicativo de que un piso puede estar vacío, sin uso o con cualquier indicativo que sea potencialmente puesto a la venta.
A partir de ahí, cada día se ponen como objetivo una calle diferente de su zona y se dedican a llamar a cada portal para entrar con la excusa de dejar una revista gratuita en el buzón. Al final siempre abre alguien y, con una revista en la mano como excusa, abren la aplicación de la inmobiliaria en el móvil y se dedican a anotar en la base de datos los nombres de cada uno de los buzones asignados a cada puerta (esto es importante, después explico). Podéis ver el acceso a dichas aplicaciones, se hace desde aquí.
Meten la mano en todos los buzones y se fijan en si hay alguno que rebose cartas o esté lleno (indicativo de piso vacío o propietarios de vacaciones) y en caso de encontrar uno, se dedican a robar las cartas para conseguir (en especial) aquellas de suministros que puedan aportar número de teléfono de los propietarios (vodafone, movistar, etc), dni, nombre y apellidos o incluso más indicativos de si vive alguien allí de normal (luz, agua, gas...).
Después, aprovechan para dejar las revistas o los flyers en los buzones por si algún vecino los pilla ahí y poder tener así una coartada del tiempo que han pasado desde que les abrieron (ya que algunos vecinos bajan a ver cuando abren por reflejo sin querer según me comentaron).
Una vez han dejado la propaganda, suben y llaman una por una a cada puerta, pidiendo a los vecinos información sobre si hay algún piso vacío o si saben de alguien que quiera vender, indicando que tienen gente interesada en comprar en esa calle (falso) o que otro vecino les comentó que había alguien interesado en vender pero no sabía exacto la puerta (falso también). Tras la conversación con cada puerta, abren de nuevo la aplicación del móvil y anotan cualquier info que hayan conseguido, ya sea un teléfono, nombres de propietarios o el resumen de lo hablado con la vecina de la puerta X. Así un patio tras otro.
Otro tema interesante es que ponen por todas las calles los típicos papeles de "Quiero comprar un piso por esta zona" como si fuera un particular, para que cuando llame alguien que quiere vender su piso lo pillen ellos diciendo que es que gestionan ellos a dicho particular que quiere comprar (que no existe). Así que ya sabéis, ningún particular pone papeles de que busca piso por una calle, son las inmobiliarias.
2. Desarrollo
Tras el trabajo de zona, van a la oficina y ponen en orden la información conseguida en el día. Se dedican a abrir las cartas robadas, cruzar datos de su aplicación con otras webs que dan información personal de propietarios como infobel y otros para conseguir teléfono, nombre y apellidos de cada propietario, para dedicarse a llamar por teléfono poniendo la excusa de que un vecino de la finca les facilitó el contacto y les dijo que quizá estaban interesados en vender, etc. Su objetivo principal es enterarse de cualquier piso que pueda ponerse en venta los primeros.
3. Visitas y papeleo
Una vez consiguen a propietarios interesados en vender, los intentan convencer de firmar una exclusividad y llevar el piso para venderlo. Se dedican a poner los pisos que llevan en páginas como idealista, fotocasa, etc, buscar compradores y gestionar las visitas. Lo típico vaya.
¿Qué ganan los comerciales?
Pues este punto es interesante. El comercial gana 800€ mensuales fijos + 10% de las comisiones por venta que se lleve la inmobiliaria. Dichas comisiones suelen ser unos 8000€ + iva por lo que el comercial se saca 800€ netos por cada piso vendido. Por lo tanto, obviamente su interés es el de vender cuantos más pisos mejor y se la suda completamente que sea el mejor precio o no tanto para comprador como vendedor. Por otro lado, tiene unos objetivos mensuales que si no cumple lo tiran a la calle, por lo que no se cortan ni tres en robar cartas a mansalva y dar la lata a cuantos más vecinos mejor.
¿Y llevarse cartas no es ilegal?
Pues bien, debemos saber que apoderarse de la correspondencia ajena es un delito tipificado en el Código Penal en su artículo 197.1º. Es importante recalcar que se trata de un delito cuando la persona,“para descubrir los secretos o vulnerar la intimidad de otro, sin su consentimiento, se apodere de sus papeles, cartas, mensajes de correo electrónico o cualesquiera otros documentos o efectos personales [..]”
¿Qué sanciones y penas existen por abrir correspondencia ajena?
Penas de prisión de 1 a 4 años y multa de 12 a 24 meses.
Interesante comentar que si pillan a alguno robando cartas, es culpa del comercial y no de la empresa porque la empresa siempre puede decir que el empleado se extralimitó y al final la responsabilidad de este tipo de actos es de la persona. Demostrar que esto es una práctica que se fomenta desde la formación el primer día de trabajo es muy complicado.