La ciudad de Nueva York verá cómo, nueve años después de los atentados del 11 de septiembre de 2001, una mezquita se construye a dos manzanas de la llamada zona cero, donde en su día se irguieron las Torres Gemelas. Hoy, la Comisión de Preservación de Edificios Protegidos del gobierno local ha votado unánimemente en contra de concederle amparo arquitectónico al edificio que en ese momento ocupa aquel solar, abriendo la vía a su demolición y al inicio de las labores de construcción de la mencionada mezquita, por un presupuesto de 75 millones de euros.
Los familiares de las víctimas califican a este proyecto como un insulto y una glorificación al asesinato de 3.000 personas. El sector más conservador de la sociedad mantiene que es algo así como una victoria del mundo islamista más radical y pide a los musulmanes pacíficos que repudien esta construcción.
El debate está servido...