El estilo Románico llegó a España de la mano de los francos que comenzaron a a repoblar la península ganando terrenos a los musulmanes, gracias al rey Alfonso VI que reconquistó Toledo en 1.085. Los arquitectos, canteros, escultores y artesanos francos se instalaron por toda la mitad norte de España y construyeron iglesias siguiendo el estilo que marcaba desde Francia la orden benedictina desde Cluny. En este momento Cluny es la abadía más poderosa de Europa y junto con el Papa Gregorio VII, se proponen la unificación del rito católico. Francia estaba en un momento de explosión demográfica y eso alentó este movimiento migratorio. Esta expansión impulsó la Peregrinación a santuarios donde se veneraban importantes reliquias, en España, a Santiago de Compostela. Por las vías circulaban no sólo peregrinos, también, comerciantes, juglares, los canteros y las ideas. De esta forma el Occidente cristiano alcanzó la unidad que deseaba el Papado y Cluny y que, en arte, derivó en el ROMÁNICO.
CARACTERÍSTICAS GENERALES
Edificios en piedra grande y bien labrada.
De planta Basilical con tres NAVES y cabecera con tres ÁBSIDES semicirculares, el central mayor que los laterales.
Las cubiertas de las naves con BÓVEDAS de medio cañón en la central, de aristas en las laterales y CÚPULA sobre pechinas en la intersección del crucero.
Las VENTANAS son muy estrechas, tienen Arcos de Medio Punto enmarcadas por Columnillas con Capiteles decorados que soportan arcos con Canecillos y Ajedrezado.
Los MUROS son muy gruesos y en el exterior se sujetan con grandes contrafuertes y se decoran con líneas de imposta horizontales también con ajedrezado, arquillos o lisas.
La zona que recibe la decoración es la PORTADA, la entrada al templo es un arco de medio punto con ARQUIVOLTAS donde encontramos esculturas figurativas.
Se completa con una TORRE campanario poco esbelta.
En el interior las naves están separadas por PILARES que sostienen los arcos transversales que separan las naves. Llevan adosadas COLUMNAS con capiteles con relieves que muestran escenas bíblicas, motivos vegetales o seres fantásticos, para sujetar los arcos de las bóvedas, llamados FORMEROS.
La cabecera de las iglesias está orientada al Este, y por las ventanas de los Ábsides penetran los primeros rayos del sol y, a continuación por los vanos del muro Sur, este hecho influirá en las disposición de la decoración interior, pinturas y esculturas, para lograr un resultado efectista y plástico.
El edificio románico es un ámbito recogido y aislado del espacio exterior natural, es la casa de Dios.
Penetrar en él provoca sensaciones que ayudan a percibir algo sobrenatural.