Isabel Carrasco, presidenta de la Diputación de León y del Partido Popular en esta provincia, se enfrenta en los tribunales a una acusación de malversación de fondos públicos.
El Juzgado de Instrucción número 3 de León admitió a trámite el pasado miércoles, 5 de febrero, la ampliación de una denuncia del concejal del Partido Autonomista Leonés (PAL) y ex militante del PP, Francisco Gómez, por cobrar los gastos de desplazamiento de León a Madrid a los consejos de administración de Tasaciones Inmobiliarias (Tinsa), empresa participada por Caja España hasta noviembre de 2010, cuando iba supuestamente en el coche oficial.
En concreto la juez Blanca Esther Díez quiere averiguar si ingresó en su cuenta el gasto de kilometraje los mismos días que iba en el coche de la Diputación. Esta investigación amplía la que abrió la magistrada el año pasado por asistencia a las comisiones ejecutivas de Caja España-Duero a las que supuestamente iba con el Audi A6 propiedad de la institución leonesa y con su chófer.
Isabel Carrasco habría realizado y cobrado cerca de 40.000 kilómetros, 21.000 para reuniones de Tinsa en Madrid y el resto para reuniones de la Caja en Salamanca u otras provincias. La entidad paga el kilómetro a 20 céntimos.
La presidenta de la Diputación ha percibido, además, en concepto de dietas vinculadas a Caja España-Duero, unos sobresueldos anuales de 50.760 euros en 2008, 54.120 euros en 2009, 59.400 euros en 2010 y 30.720 euros en 2011, según documentos internos del banco CEISS. Carrasco cobra cerca de 80.000 euros de la Diputación.
En el auto judicial fechado el 5 de febrero, al que ha tenido acceso EL MUNDO, la magistrada ordena a Caja España-Duero que le remita el importe "de las cantidades pagadas a la Sra. Carrasco en su condición de consejera en Tasaciones Inmobiliarias S.A., en representación de la entidad, señalando cuáles corresponden a gastos de desplazamiento, el concepto de dichos gastos y la documentación en su caso". Además, reclama a la Diputación leonesa que le remita un listado de gastos realizados con la tarjeta de débito asignada a su chófer en los 30 viajes realizados a Madrid entre 2008 y 2010.
Caja España-Duero pagaba a Carrasco y al resto de consejeros que formaban parte de empresas del grupo una dieta común, tras recibir la entidad el dinero de las compañías. Además, costeaba los gastos de locomoción, bien mediante el justificante del transporte, bien con el documento de liquidación de gastos por desplazamiento.
Fuente: ElMundo