Hombre que si perjudican, al Derecho y uso del mismo, no a los sindicatos, estos son meros instrumentos.
Y los sindicatos serán importantes, porque son el agente social constitucionalmente reconocido, junto a las organizaciones patronales, para la promoción y defensa de los intereses económicos (art. 7 de la CE), que se nutren de trabajadore (art. 28.1 CE) para que la conflictividad se encauce mediante la negociación colectiva o adoptando medidas de conflicto colectivo (ya sea la huelga 28.2 de la CE o la judicialización de estos procesos).
Por eso, es necesario una sindicación fuerte, porque si bien la Ley establece unos mínimos, ya sean disponibles o indisponibles, dentro del Esatuto de los Trabajadores, este habilita al Convenio Colectivo, norma de carácter mixta ya que es un contrato entre partes pero con efecto normativo -erga omnes, como la ley- para que regule las condiciones laborales en el ámbito que determinen dentro del sector que determinen las partes.
Pues bien, con estos trajes, es obvio que sin el agente social es débil, no podrá tener una postura fuerte, por lo que, los Derechos Laborales han ido hacia atrás.
¿Que tiene que ver aquí al inmigración? Pues muy sencillo, al haber exceso de oferta de mano de obra, en trabajos que requieren poca cualificación, la simple comunicación de establecer una sección sindical o de promover unas elecciones sindicales en un centro de trabajo se vuelve imposible, por cuanto, la regla general, es articular un despido, que si bien es nulo, normalmente se soluciona dándole dinero al despedido, que no pelea por la readmisión, bueno, incluso si se declara nulo, es el único caso en que el mismo decide si reingresa o no. Una situación que premia lo individual sobre lo colectivo, y cuyas consecuencias a diario (lo veo, con mis ojos muy a menudo) tienen un doble efecto: eliminas la amenaza sindical y por otro lado avisas a navegantes de las consecuencias de jugar al sindicato.
Así que, los derechos laborales han retrocedido bastante, porque el sujeto que lo defiende está en horas bajas, más aún si en 2012 premias el convenio de empresa (con niveles de sindicación bajísimos) sobre el convenio sectorial en materia de salario (por ejemplo), sin contar que igualmente se cargaron la ultractividad de los convenios, habilitando una prórroga de un año solamente para los convenios, lo que provoca un decaimiento de toda esa normativa, lo que provoca presionar más aún a los sindicatos, que no tienen fuerza y firman acuerdos colectivos que dan vergüenza.
Esto es por un lado, ¿cómo afecta la inmigración? Pues que respecto de personas más vulnerables, más sencillo será presionar con despidos, pero no solo se presiona así, también se presiona si no se echa la horita gratis, si te pago la mitad en A y la otra en B, cotizando menos por tí o, directamente, si se carece de permiso de trabajo, te pago en B y te tengo en una casucha encerrado para que duermas y me recojas la fruta en la misma finca. Y aquí está el meollo, esto supone un crecimiento del PIB, pero ¿a qué precio?
Es que ese estudio, habla de empleo de manera etérea, pues un puesto de trabajo, en genérico, cuenta igual un contrato indefinido a 40 horas que uno parcial de 16 horas semanales ambos.
Y no he necesitado de estudios para hacer esto, simplemente conocer el derecho laboral, de libro y de práctica. A mayor precariedad individual, mayor precariedad colectiva, y a mayores te diré, que no ha mejorado ningún Derecho vía convenio colectivo fuera del Estado, ya que la conciliación familiar corre a cargo de la Seguridad Social en paternidad. Y se ha introducido, por ejemplo, mayor flexibilidad en el trabajo.