Vox ha cesado a Antonio Gallego Burgos de sus cargos como secretario general y portavoz adjunto en el Parlament de Cataluña. «Sigue siendo diputado en el Parlament y ha sido reubicado como portavoz en las comisiones de Economía y Acción Climática», han revelado fuentes de Vox en Cataluña.
Ahora bien, la destitución de Gallego como uno de los máximos representantes del partido de Abascal en Cataluña responde a otros motivos: «Desavenencias con la secretaria general y con la dirección nacional». Según fuentes cercanas al diputado y consultadas por OKDIARIO, Antonio Gallego tuvo discrepancias con la cúpula del partido y con su secretario general, Javier Ortega Smith, que es la persona encargada, junto con el vicesecretario de organización Tomás Fernández, de coordinar la organización territorial e institucional del partido.
«Antonio Gallego es un referente de Vox en Cataluña, es un gran profesional que viene del ámbito privado. Tiene una gran solvencia y rigor. Su cese le ha causado un gran disgusto. Lo han cesado por desavenencias con la secretaría general y con la dirección nacional. El problema es que no se puede tratar a la gente como ganado ni a gritos y menos a una persona de prestigio y a un gran profesional como es él. Le han hecho lo mismo que a Macarena Olona», han revelado fuentes cercanas al diputado.
Ahora que Gallego ha sido «reubicado» OKDIARIO ha podido saber a través de fuentes de Vox en Cataluña que le sustituirá en sus cargos Sergio Macián, diputado de Vox por Tarragona en el Parlament, letrado de la administración de justicia y experto en seguridad. Asimismo, OKDIARIO ha consultado a fuentes del grupo parlamentario de Vox en Cataluña que han afirmado que la decisión ha sido por mera «efectividad» y porque Antonio Gallego estará mejor ubicado en las comisiones de Economía y Acción Climática que en sus anteriores puestos como secretario general y portavoz adjunto. «Era una pena que estuviera de portavoz y no en esas comisiones porque es un experto en esas materias», han defendido. Asimismo, niegan cualquier intervención de la secretaría general en la destitución pero reconocen que pueden existir desavenencias.»Es importante que todos estén unidos y vayan en la misma dirección. Es verdad que a veces pueden existir desavenencias».
No es la primera vez que un cargo orgánico o institucional choca con los mandatos de la secretaría general que dirige Ortega Smith. Rocío Monasterio también tuvo discrepancias con el dirigente y con «el aparato del partido» que querían controlarla pero finalmente la presidenta de Vox Madrid pudo alcanzar cierta independencia con la inauguración de su propia sede en la calle Padre Damián. Además consiguió que la dirección nacional respetase su autoridad para elaborar sus propias listas para las elecciones municipales y autonómicas.