Parte de los grabados rupestres prehispánicos de la montaña de Enmedio, o de Jaifa, situada en Puerto del Rosario, Fuerteventura,, han aparecido cubiertos por una bandera española pintada sobre la roca donde se encuentran, según ha denunciado la Coordinadora Montaña de Tindaya.
En un comunicado, esta organización ecologista recuerda que esta estación de grabados rupestres es de variada tipología y está catalogada como Bien de Interés Cultural.
Sin embargo, denuncia que este BIC, al igual que la mayoría de las estaciones de grabados rupestres de la isla, sigue sin tener delimitado su ámbito de protección a pesar de que han solicitado “en repetidas ocasiones” al Cabildo de Fuerteventura que proceda “a cumplir lo dictaminado por la Ley de Patrimonio de Canarias”.
Esta organización lamenta que en los últimos meses Fuerteventura haya sufrido “graves ataques a su patrimonio histórico y arqueológico”, que han afectado, entre otros lugares, el denominado Sol de Tejate, a la Montaña de Tindaya o a la estación de grabados de Los Risquetes.
Este colectivo ecologista asume que resulta imposible garantizar “la protección absoluta” de las numerosas estaciones de grabados y yacimientos arqueológicos con los que cuenta la isla frente a las acciones de “personas inconscientes o desaprensivas”.
Sin embargo, opina que “la dejación de funciones de la que hace gala el Cabildo está facilitando sobremanera esta lamentable situación”.
La Coordinadora Montaña Tindaya ha vuelto a solicitar al Cabildo de Fuerteventura que delimite todas las estaciones de grabados rupestres, que aumente la vigilancia sobre el patrimonio natural e histórico y que realice campañas informativas y educativas que ayuden a concienciar a la población residente y visitante sobre el valor y la fragilidad del patrimonio indígena.
El consejero de Patrimonio Histórico del Cabildo, Juan Jiménez, ha condenado en unas declaraciones difundidas a los medios cualquier atentado de este tipo y ha subrayado que hay que evitar estos episodios de expolio o agresión, que, en algunos casos, resultan “irreversibles” y, en “el mejor de los casos, cuando hay daño localizado, como este, se puede acometer trabajos de restauración y recuperación”.
El responsable de Patrimonio Histórico ha insistido en que “hay que seguir mejorando la conciencia cívica respecto al patrimonio arqueológico, de manera que las próximas generaciones cuiden y mimen nuestra cultura aborigen para que perviva”.
La idiotez de las banderitas está empezando a alcanzar unas cotas de estupidez sin precedentes, vaya gentuza.