La población española alcanzó en el primer semestre de 2019 su máximo histórico y supera los 47,1 millones de habitantes gracias a la inmigración. El incremento, según los datos provisionales de población del Instituto Nacional de Estadística (INE), se debe al crecimiento de la población de nacionalidad extranjera, mientras que el número de habitantes de nacionalidad española se reduce.
Una vez más, el crecimiento vegetativo de la población, la diferencia entre nacimientos y defunciones, ha sido negativo: murieron 214.218 personas y se registraron 169.216 nacimientos. Y la inmigración vuelve a compensar ese desequilibrio. En la primera mitad del año pasado se registró un saldo migratorio positivo de 209.097 personas, el valor más alto desde que se inició la serie en 2008. En total, hubo 348.625 inmigraciones y 139.528 emigraciones.
Del total de personas que han llegado a España en el primer semestre, un 88,9% tenía nacionalidad extranjera, mientras que un 11,1% eran españoles. En cuanto a las 139.528 salidas, el valor más bajo desde 2008, el 74,7% fue de extranjeros y el 25,3% de españoles.
El saldo migratorio positivo llevó a un aumento de 183.073 personas extranjeras. Por el contrario, la población de nacionalidad española se redujo en 19.737 personas. Según los datos del INE, hay en España un total de 5.023.279 foráneos, un 10,67% del total.
La población venezolana fue la que más creció en porcentaje en el primer semestre de 2019, con 24.238 personas más, un aumento del 18%. También la nacionalidad colombiana (con 27.920 personas más) creció un 14%, y es la que más aumenta en números absolutos. Estas son las dos nacionalidades que más solicitan asilo en España. También la población marroquí ha aumentado en 20.627 personas (un 2,9%). La población ecuatoriana, por el contrario, se redujo en 1.651 personas y la rumana en 964.
Por comunidades
Durante el primer semestre de 2019, la población creció en 13 comunidades autónomas y se redujo en las cuatro restantes, así como en las ciudades autónomas de Ceuta y Melilla. Los mayores incrementos en términos relativos se dieron en las islas Baleares (0,87%), la Comunidad de Madrid (0,66%) y Canarias (0,61%). Por el contrario, los descensos de población se dieron en Extremadura (–0,25%), Principado de Asturias (–0,22%), Castilla y León (–0,20%) y Galicia (-0,06%).
Cataluña (47.119 personas), Comunidad de Madrid (40.539) y la Comunidad Valenciana (27.162) fueron las autonomías en las que más extranjeros se establecieron.
https://elpais.com/politica/2020/01/08/actualidad/1578483165_970264.html