Javier Gaona es un hombre de 31 años que el pasado 20 de julio murió por disparos de la Policía. La versión de los agentes explica que Gaona, armado con un cuchillo, amenazó con suicidarse y ante esta situación la policía intentó negociar con él.
Las autoridades aseguran que mientras se procedía a la negociación sólo se usaron 'pelotas de goma', pero en el momento en el que el fallecido comenzó a agredirse a sí mismo y se precipitó sobre los agentes fue cuando "se vieron obligados" a abrir fuego.
La Policía asegura que "no pudo hacer otra cosa". Sin embargo, la versión de la familia del fallecido es diferente. El abogado de la parte de la víctima considera que en un vídeo se demuestra que Javier Gaona no se precipitó sobre ellos si no que se tambaleó hacia adelante. Además, considera que reaccionaron "exageradamente".
Desde su punto de vista, Javier Gaona no suponía un peligro tan elevado para los demás que justifique la reacción que se tuvo ante esta situación
La familia reclama una indemnización de 3 millones de euros y pide que se forme a los agentes que tengan que tratar con situaciones con personas "inestables" o con "problemas mentales", según informa keyt.com.