Fedea ha publicado hace nada un estudio que analiza el impacto en la temporalidad de la reforma laboral de 2021.
Como cualquier persona que hable de estos temas sabe, desde que se llevó a cabo ha habido un debate acerca de si las cosas habían mejorado gracias a la reforma o si había sido un cambio de nomenclatura para esconder bajo la alfombra de los "fijos-discontinuos" los problemas de sobretemporalidad del mercado laboral.
En ese debate, yo personalmente veía argumentos flojos a favor de lo segundo, pero este estudio es un potente argumento a favor de ello, utilizando datos directos de la SS.
Algunos gráficos xulisimos:
Después de la reforma, efectivamente vemos un aumento mayor en contratos permanentes que temporales:
PERO, los días medios por contrato trabajado no cambian:
Lo que esto significa es que hay mayor tasa de mortalidad -contratos permanentes que se terminan en la fase de prueba-: