Últimamente los sábados salgo con la pandilla a un garito que nos mola mucho. Tiene varias máquinas recreativas con juegos rollo Wonderboy, Streets of Rage o Final Fight. Por cada consumición te regalan una ficha para que puedas jugar. Para los viciados a los videojuegos como yo, el local es una pasada.
Como guinda del pastel, detrás de la barra hay una camarera bellísima. Es de las que se ponen el mecanismo de defensa antes de salir a la calle. Obviamente, me pone bastante.
El local cierra a las 3:00, y ella termina de trabajar a las 2:30. Siempre se queda dentro dándole duro a alguna máquina o tomando una birra con algún grupito. Una noche, estaba yo a solas con un colega en la barra, y ella de vez en cuando se acercaba a charlar con nosotros. Cuando terminó de trabajar se sentó con nosotros, en el centro. Mi colega (que lleva más tiempo que yo como cliente del local) me dijo que nunca se había sentado con él anteriormente. Estuvimos charlando un poco y después la acercamos a su casa en coche.
El sábado pasado volvimos al local. Eramos 5. 3 chicas y 2 chicos. Cuando llegamos ella me preguntó por la película que le recomendé la semana anterior, diciéndome que no recordaba el título. Le dije que me dejara una servilleta y un bolígrafo. Ella siguió atendiendo a los clientes, y yo le puse el título de varias películas que me gustan mucho y de paso le puse mi número de móvil. Aproveché el momento para jugar mis cartas. Ella cogió la servilleta y la guardó en su bolso. Me dijo que el domingo no tenía planes con su novio, y que posiblemente la viera ese día. Lo que viene siendo un bloqueo en toda regla.
Durante la noche yo estuve a lo mío, jugando a las máquinas y charlando con mi pandilla, en la barra. Ella se acercaba de vez en cuando a escuchar las conversaciones. Las chicas de mi grupito son muy cariñosas y son de las que todo el rato dan besos y abrazos. Una de ellas me dijo que la camarera cada vez que se acercaba no dejaba de mirarme. Yo iba a lo mío, así que no me di cuenta.
En un momento de la noche, cerca de las 2:30, mis amigas se fueron a la calle para fumar, y nos quedamos mi colega y yo a solas. Ella volvió a sentarse con nosotros, en el centro. Cuando volvieron las chicas, nos dijo que se tenía que marchar y se despidió. Pero no se fue a su casa. Se fue a otro sitio de la barra, a charlar con otra gente. Al irnos, nos estábamos despidiendo de dos de las chicas que viven al lado, cuando veo que ella se acerca caminando, con sus auriculares puestos. Le decimos que si quiere la acercamos a su casa (realmente vive a 10 minutos andando) y acepta. Se sentó en la parte trasera del coche, junto con una de las chicas. Yo estuve hace poco en el piso de esta chica, porque hace poco que se ha comprado un piso, y me lo quería enseñar. Mi amiga mencionó la noche que estuvimos en su piso e inmediamente la camarera dice: "Veo que vas al piso de muchas chicas" y yo "¿Estás celosa? Su respuesta: "Más quisieras".
Hasta aquí, por el momento. No me ha escrito todavía. Le gusta tontear y ya está. Había descartado la posibilidad de acostarme con ella, aunque después de los hachazos, no la voy a borrar de mi lista de objetivos. Este fin de semana ya veré que sucede, porque ya he quedado para cenar y para tomarme unas birras allí.
Lamento el tocho. En mi mente no parecía tan abultado xD Como siempre, los consejos son bien recibidos
No me pegues, Bobbie :si: