Pues a mí me encantan los ruiditos al comer, ese sonido gutural de que le está llegando a la campanilla, a punto de vomitar... ñam!
Los gruñidos, comer con la boca abierta o las manos, engullir grandes bocados, hablar con la boca llena o mostrar nuestra satisfacción con eructos no es lo más adecuado, sobre todo si el anfitrión no procede de un país árabe.
PD: Comer con la boca cerrada es un concepto burgués, lo natural y la mejor forma de saborear la comida es con la boca abierta, por no hablar de que se respira con más comodidad.
PD2: También podéis seguir reprimiendo vuestros instintos en función de unas normas absurdas, probablemente ideadas por un paleto, durante el resto de vuestras vidas. Espero que encontréis alguna razón para hacerlo que no sean esas reglas creadas esplícitamente para despreciar al prójimo.
Saludos
Parace que es la noche_"lo que odiamos" Uu'... mientras no me esté enseñando la papilla de lo está masticando me da bastante igual..