No se cansan de andar con gilipolleces de este calibre. Tonterías y más tonterías, para flipar.
El Ministerio que dirige Trinidad Jiménez ha llevado hasta el extremo la eliminación del lenguaje sexista.
Primero fueron los «miembros y las miembras» de Bibiana Aído... y ahora llega el término «criatura» para referirse a los «recién nacidos». Poco a poco, la eliminación de todo rastro de «sexismo» en el lenguaje, que con tanto ahínco pregona el Ministerio de Igualdad empieza a extenderse por otras instancias oficiales, empezando por el Ministerio de Sanidad y Política Social que dirige Trinidad Jiménez.
La eliminación de la expresión «recién nacido» para referirse a los bebés o neonatos, como se les ha denominado toda la vida, se produce en un marco concreto, el último borrador de la Estrategia Nacional de Salud Sexual y Reproductiva. Como ya informó LA RAZÓN el pasado mes de enero, el primer texto preliminar de este documento, que constaba de 192 páginas, desató una intensa polémica, al proponer Sanidad en él la revisión del rol reproductivo de las mujeres y al ensalzar el cibersexo porque, a juicio de los expertos del Ministerio que interpretaron la última encuesta de salud sexual, «contribuye a fomentar la fantasía y es un escape para los más tímidos», además de satisfacer «deseos sin riesgo de embarazo no deseado o infecciones».
La reacción social y el malestar mostrado por varios representantes de Sanidad autonómicos llevaron entonces a Jiménez y a su equipo a retirar el documento del Pleno del Consejo Interterritorial de Salud en el que iba a ser aprobado, para retocarlo y eliminar las partes más chocantes. En concreto, se acusó a Sanidad de tratar a la ligera el «sexo virtual», que constituye una amenaza para muchos menores de edad.
Cuatro meses después, el último documento, al que ha tenido acceso este periódico, suprime, efectivamente, los párrafos de la discordia acerca del cibersexo, aunque mantiene el objetivo general de «promover una salud sexual vivida de una manera integral, autónoma, diversa, igualitaria, placentera y respetuosa, a lo largo de la vida... contribuyendo de esta manera a mejorar el bienestar de los ciudadanos». Sin embargo, la gran novedad estriba en la terminología empleada: a lo largo de sus 162 páginas, la expresión tradicional de «bebé» para referirse a los neonatos puede contarse con los dedos de la mano. En su lugar, aparece más de un centenar de veces el término «criatura», mucho más neutro y válido por tanto para contemplar tanto el sexo masculino como el femenino, indistintamente.
Fuentes del Ministerio han explicado a LA RAZÓN que el cambio terminológico ha sido responsabilidad de Concepción Colomer, la actual responsable de un órgano adscrito a Sanidad llamado Observatorio de la Salud de la Mujer. Su empeño en sustituir las palabras «recién nacido» por «criatura», para eliminar la forma masculina, ha motivado algunas disputas en el seno del comité que ha redactado la estrategia nacional, y provocado el enfado de algunos técnicos y funcionarios del Ministerio.
La forma y no el fondo
Muchos de estos profesionales no entienden la importancia de este cambio para el logro de los objetivos de salud sexual y reproductiva que figuran en el documento. Sin embargo, más allá del contenido del documento, su obsesión ha sido en todo momento, aseguran, «evitar el lenguaje sexista en el mismo». De este modo, las «criaturas» aparecen en el texto más de un centenar de veces.
Además de la expresión «criatura», el borrador emplea también en alguna ocasión, quizás por desliz, el término «criatura recién nacida», «criatura RN» o, simplemente, «RN». En este sentido, por ejemplo, recomienda como objetivos «recibir a la critatura RN en las mejores condiciones para su salud, bienestar y adaptación a la vida extrauterina» o «facilitar la adaptación de la criatura RN al ambiente extrauterino en contacto con su madre».
Adiós a los chupetes gratis en el hospital
Dentro del abordaje diferencial de la salud sexual y reproductiva que propugna el Ministerio de Sanidad, la estrategia recoge un sinfín de recomendaciones generales y específicas para la promoción de la salud de la mujer y del recién nacido («criatura»). En el capítulo relativo a la mejora de la misma durante el embarazo, el borrador del documento incluye un apartado llamativo, con el objetivo de que se cumpla lo que denomina «Código de Comercialización de Sucedáneos de Leche Materna». La meta última es «evitar prácticas como la entrega de maletines con regalos de la industria o chupetes o muestras de sucedáneos y evitar la publicidad encubierta mediante el uso en consulta o instituciones de material de papelería con contenido publicitario de dicha industria». Así que las madres ya no recibirán chupetes gratis cuando den a luz en el hospital.