El diputado por Jaén no deja que su nómina se publique en el portal de transparencia de Podemos, como la del resto de sus compañeros de escaño. ¿Qué esconde? Mucho. Aquí los detalles.
El diputado Diego Cañamero tiene tanto respeto por la Justicia que este martes ha decidido no acudir a declarar como investigado -antes imputado- al Tribunal Supremo por un delito contra los derechos de los trabajadores; presuntamente por coaccionar a unos trabajadores para que hicieran huelga. Y encima presume de "insumiso judicial".
Además de ésa practica otra insumisión: la de no facilitar sus nóminas para que sean publicadas en el portal de transparencia de Podemos, donde se publican las de todos los cargos públicos de la formación morada: diputados, senadores, eurodiputados y diputados de parlamentos autonómicos.
Al intentar descargar su nómina del Congreso en la citada web, aparece el siguiente mensaje: "Lo sentimos, la página que buscas no existe". Por contra, sí se puede acceder a las de la gran mayoría de diputados de Podemos, desde Pablo Iglesias a Irene Montero, pasando por Carolina Bescansa, Pablo Bustinduy, Tania Sánchez y Nagua Alba, entre otros. Aunque las últimas nóminas colgadas son de septiembre de 2016, dicho sea.
¿Cuánto gana el diputado por Jaén como para querer ocultarlo? Mucho más que los 426 euros mensuales que cobraba como subsidio agrario en los tiempos en que lideraba el Sindicato Andaluz de Trabajadores. En concreto diez veces más: 4.640 euros limpios en 14 pagas.
Ello es el resultado de sumar 3.860,25 euros brutos en 14 pagas (2.813,87 euros como cualquier diputado más otros 1.046,48 euros como plus por ser portavoz en la Comisión de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente) y otros 1.823,86 euros mensuales libres de impuestos en concepto de indemnización por ser de una circunscripción distinta a Madrid. En su caso, Jaén.
Según él de ese dinero se queda con menos de la mitad, con un sueldo de 1965,60 euros en 14 pagas, para cumplir con la orden de Podemos de no cobrar más de tres veces el salario mínimo interprofesional. Y el resto lo dona al Sindicato Andaluz de Trabajadores, del que fue secretario general. Eso siempre según su versión y su palabra, puesto que no aporta ningún documento que lo pruebe.