Yo vivo en uno de 9000 habitantes, aunque cuando llegué de pequeño la cifra era bastante más baja y entonces era una aldea pura y dura, con sus tractores en las calles y abuelos con la boina. Lo malo de los pueblos es que carecen de muchos lugares de ocio y la gente es más chismosa. Aquí la mayoría nos conocemos y es lo que hay, pero también es verdad que quien va de buenas contigo te dará un trato que difícilmente encontrarás en la frialdad de una gran urbe. Para ser honestos, a día de hoy no creo que pudiera adaptarme a la vida de ciudad. Cuando quiero ir al cine o ver un concierto, me basta con coger el tren y en 20 minutos estoy ahí. En una ciudad tienes todo al alcance de la mano, pero nunca verás el trato humano que recibes en un pueblo.
#61 Antes, el calificar un nucleo poblacional como ciudad no iba determinado por el numero de habitantes... y?
1.500 habitantes es un pueblo, como tambien lo son 20.000 o 100.
Yo he vivido en pueblo y en ciudad y gilipollas y gente amable hay en todas partes.
Lo único que creo que es mucho mejor de la ciudad es que al no conocerte nadie, nadie está pendiente de lo que haces o dejas de hacer. Por lo demás, cada lugar tiene sus cosas, sus ventajas y desventajas, es cuestión de adaptarse.
De todas formas, si por mi fuese no viviría ni en ciudad ni en pueblo, viviría en el bosque, lejos de todo el mundo, a ser posible.
#8 Yo sí digo hola al cajero/a, pero lo hago a desgana porque no me apetece. Para mí es un robot. Tengo la cabeza llena de demasiadas cosas como para saludar a gente que me la suda. Ahora resulta que no decir hola al cajero o que no te lo diga él es de mala educación... manda huevos.
#70 Pues sí, es de mala educación no saludar a alguien que te está atendiendo o a la que estás atendiendo, aunque sea su trabajo, igual que es de mala educación no pedir las cosas por favor y no dar las gracias.
#71 Porque tú lo dices, vaya. Pues si yo me acerco a la caja con la churri, estamos hablando de nuestras cosas y empiezo a dejar productos en la cinta, no voy a interrumpir la conversación con la churri para decir hola. Así de claro.
#75 Tu crees que la gente que trabaja de cara al publico quiere que la ignoren y la traten como si fuera un objeto inanimado?
#76 De cara al público trabaja un vendedor con el que tengo que interactuar, pero un cajero, un conductor de autobuses, etc. no veo que tenga que estar saludando ni hablando a no ser que tenga algún tipo de incidencia. Ellos hacer su trabajo, yo no les interrumpo y cada uno a lo suyo. Habéis visto mucho show de truman me parece a mí.
#79 Meto la tarjeta (o la acerco), pongo el pin y en todo caso me dan el recibo.
Por cierto, hace poco en el carrefour la cajera no me dice nada y le digo: "qué hago, la meto?" y me responde: "sí, tienes que meterla". Y fue muy incómodo. Lo dicho, lo mejor es no hablar.
#70 Si es de ser muy maleducado. Pero viendo lo que acabas de escribir tienes toda la pinta de ser un faltoso
#81 Para nada, lo dije sin pensar y sin ningún doble sentido. Es más, nos dimos cuenta ambos cuando ella respondió y no fue nada agradable. A mí las bromitas verdes con segundas con las mujeres no me gustan. Lo considero de viejo verde prematuro.
Faltoso en absoluto. Y reitero mi derecho a no saludar. Hay gente que no sólo saluda, sino que entretiene, quiere hacerse el gracioso, se mete donde no le importa, etc. Y eso sí es faltar el respeto. No hay prepotencia ni superioridad en no saludar a un/a cajero/a. Hacen su trabajo, yo hago mi compra y fin de la historia. Ver más allá es aplicar ciertos cánones culturales que varían en el tiempo y en la cultura.
#83 Ya veo que eres lo suficientemente educado como para saludar a la gente que no conoces y también para llamar gilipollas a los demás. Gran educación la que te han dado tus padres. Mi más sincera enhorabuena.
#84 Ya que me moderaron, te lo pondre sin insultos.
Una persona que trata de robot a otra que esta trabajando de cara al publico NO MERECE NINGUN RESPETO.
Eso si que me lo enseño mi madre. A la gente que no trata con respeto a los demas pagale con la misma moneda
He vivido 15 años en un barrio de siete casas en el grano del culo del mundo, y creo que te puedo entender.
Era un barrio en mitad de un mar de invernaderos que, en verano, acumulaban el calor que eso parecía el lugar favorito de Satán para pasar las vacaciones. Menos mal que, como las casas eran antiguas, todas estaban hechas de barro y piedras; por lo tanto no se escuchaba mucho de los vecinos. Pero sí podías saber quién le había puesto los cuernos a quién o si el padre del vecino le habían pillado con un alijo de coca en los guardabarros de su fragoneta.
Al tema de los sonidos mañaneros, yo he tenido que despertarme también con el sonido de los tractores, e incluso el de las alarmas de los invernaderos. De verdad, eso parecía un aviso de bomba nuclear. Por la mañana, en invierno, tenía que hacerme un camino de quince minutos andando por una carretera sin luces a las siete de la mañana para coger el autobús de mi instituto.
Ya de más pequeñita no salía a jugar, porque mi vecino no hacía más que meterse conmigo y hacerme comer tierra. Así que mi aburrimiento era máximo. Tampoco podías salir a pasear porque en verano te quemamas a los diez minutos de estar al sol, y en invierno anochece demasiado y eso, para una chica de 12 años se resume en "un moro te va a violar como te vea deambulando por ahí" de su madre. Teníamos que ir en coche hasta para comprar pan. Estaba alejado de la mano de Dios y no había nada que hacer excepto darte cabezazos en las paredes de piedra.
Eso si no salías, porque si salías tenías a tu vecina que te preguntaba sobre todo para cotillear y luego hablarle mal de ti a los demás vecinos y a tu madre.
Eso si que me lo enseño mi madre. A la gente que no trata con respeto a los demas pagale con la misma moneda
Tú madre es de la de ojo por ojo, diente por diente. Efectivamente, se confirma que la educación familiar es sublime.
lo mejor es que te pongas ultra fuerte, ve al gimnasio, consume esteroides y ponte en 90 y tantos kilos, los pueblerinos respetan a un tío forzudo y grande, un día sal a tomar algo y peleate, liate a tortas sin dejar a nadie con lesiones, solo porque estabas pedo.
Luego pasa a ser un tío super agradable y majo con todo el mundo, no seas muy ostentoso con lo que tienes y procura siempre ayudar a los demás, y que al final te tomen como un buen tío que si le tocan los cojones se le va la olla pero que es majo.