#28 No culpo a internet directamente. Solo digo que ayuda a asentar las cosas. Tanto las buenas como las malas. Y efectivamente les da visibilidad.
Somos la suma de lo que nos gusta, parece común o al menos coherente de la gente con la que tenemos contacto.
Ahora tenemos la capacidad de estar en contacto con prácticamente todo el mundo civilizado.
Dado que lo más chocante es lo que flota más alto en internet, ahora tenemos la capacidad de ser tan gilipollas como el gilipollas más lejano que haya puesto una foto de su cena vegana.
Y como dijo Simon Fenix: la gente tiene derecho a ser idiota.
#32 Bueno, me he ido a Google a buscarlo:
http://forums.macrumors.com/threads/why-are-thread-starters-called-the-op.668459/
If a thread has a ton of posts, no one wants to figure out who the user is that people keep talking about. So why not just say original poster
Vamos, el #1 de toda la vida... putos modernos rojos como #5 ... Esto con Rosa Diez no pasaba.
Opino que hacer un trabajo de redes sociales sin saber que no tener avatar es de mala educación, te llevará a un irremediable suspenso.
#22 Está claro que una barra de pan está fabricada para matar.
Dónde va a parar un arma con un fin distinto al que la pueda usar un descerebrado. Estamos locos.
Redes sociales, al lío...
Complementando mi comentario anterior, son una manera de que la gente sea partícipe de las tonterías de los demás, y las acepten para poder excusar la tontería de uno mismo.
Tontos todos, normales todos.
Y sí, "odio" a la gente que usa las redes sociales en modo postureo.
Opino que las RRSS son una herramienta y como tal se le pueden dar muchos usos, unos mejores otros peores, no creo que haya que poner el énfasis en las RRSS sino en la sociedad que se mueve y se deja ver en ella.
Creo que es una manera de comunicarse o informarse rápida y eso tiene sus puntos buenos y sus puntos malos.
Creo que hay una parte de la sociedad que vive en las RRSS, suben cada acción de su día a día, tienen 324.123 amigos en FB, viven de cara a la galería, viven la vida de los demás: me he comprado estas botas, he comido salmón con Ramón, voy al cine a ver Ocho apellidos extremeños, he levantado 65 kilos en el gym, estoy de viaje en Viena...
Dicho esto, no formo parte de ninguna RRSS y nunca lo he hecho.
Las redes sociales son un reflejo de las necesidades humanas, y por tanto, de la estupidez.
Queremos atención, y para eso es la herramienta perfecta. El problema está en que no se valora esa atención, no importa la calidad, sino la cantidad, lo que prostituye el concepto hasta dar puto y simple asco.