#4 Todo lo nuevo no es malo, pero esto nuevo sí que es malo. La gente no folla con Paco porque sea un guarro, la gente no folla con este porque Paco es "poca cosa" para la Charo de turno que está acostumbrada a tener a su disposición a 2500 sojosos dispuestos a la proskynesis como los persas frente a Alejandro.
Esto nuevo no es bueno porque ha inculcado a la gente a no tener hijos, porque la "liberación" de la mujer ha supuesto la asunción de un correlato parejo que habla de la familia tradicional como una cárcel de género, donde el varón somete a la hembra, la cual siempre sufriría violencia. Y lo del primer párrafo es causa de esto, porque las mujeres ya no buscan a alguien con quien merezca la pena hacer vida.
Esto nuevo no es bueno porque se ha confundido la libertad con el libertinaje. En sus enfermas mentes han buscado destruir todas las certezas, liberando al ser en una selva de inseguridades donde no son capaces de entablar nada duradero puesto que todo adolece de microopresiones que someten a X por los loles. Esto ha llevado a la mujer a esta tríada que citan en el título del hilo, que no es ninguna mentira, y ahí las tenemos, a Charos treintañeras que no son capaces de formar ese relato llamado familia porque le han dicho que ella es especial, que debe ser libre, que debe conocer y no estar sometida a la familia: al marido y a los hijos.
Y de estos polvos, los otros lodazales que citas. La destrucción de los relatos (familia, nación, clase), también ha llevado a que esas empresas utilicen esta figura del "ser atomizado" para imperar como Espartero en su caballo. No es casualidad que todas sean ahora empresas feministas, veganas, animalistas y eco-friendly, porque saben que en la diversidad está la fragmentación. Saben que mantener al individuo sin seguridades lleva al sometimiento del mismo. Hay que hacerlos sentir especiales, hay que decirles cuánto valen y qué buen equipo forman en la empresa, que sus posibilidades solo están dentro de esa empresa, que van a responder a sus inclinaciones feministas, lgtbi y ecológicas, pero que se olviden de clases y de familias, que se olviden de todo lo seguro.
Y esto es lo que nuestra decadente izquierda, de la mano de la gran empresa de sello tecnológico, no solo ha permitido, sino que ha sido uno de los jinetes que guadaña en mano nos ha llevado a esta hecatombe propagándolo. Una izquierda desnortada que está abocando a mujeres y hombres al desconocimiento de la vida marital, acusada y señalada como algo arcaico, añejo y feo, que sirve para someter y no para crear, que no es algo deseable sino que hay que despreciar.
Esto es lo que está llevando a tantas relaciones al fracaso, esto es lo que está haciendo que tantos hombres se suiciden, y esto es lo que está llevando a tantas mujeres a ser unas amargadas en vida, a las cuales les han dicho que son especiales, que lo merecían todo y que ahora se ven sin absolutamente nada, echando de menos la oportunidad de vida que "Paco el guarro" les había ofrecido.