#160 Todo empezó con el cierre de una tienda Zara en el centro comercial Mediterráneo (Almería), con 43 empleados de los cuales 16 mujeres habían reducido su jornada laboral para cuidar a sus hijos menores de edad. La empresa reubicó a los trabajadores sin reducción en la tienda recién abierta del centro comercial Torrecárdenas, a 1,9 kilómetros, si bien ofreció tres alternativas distintas a las 16 dependientas citadas: cambiarlas al horario de fin de semana por la mayor afluencia de público, moverlas al centro comercial Gran Plaza de Roquetas de Mar (a 25 kilómetros) o a una tienda en el Paseo de Almería o, en caso de que lo rechazaran, una salida pactada con una indemnización de 20 días por año trabajado.
Aquí entendí yo, que quieren ser ubicadas en Torrecardenas con sus condiciones previas, puesto que no les ofertaron nada más que en esa tienda los fines de semana, o que les mandaran a 25km de ofertano perrunillas por extinción de contrato, entre las 3 que se ofrecían a las 16 trabajadoras.
Claro, aquí han dicho que no me ofrecen estar ahí directamente por ser madre (de ahí los 6000 claveles) y que se busca una igualdad de trato con el resto de compañeros.