Tal vez habría que empezar diciendo que la palabra guagua se usa en la expresión de guagua y como sustantivo, equivalente en este caso a autobús. La expresión de guagua, 'de balde', es más antigua y se registra en América y España en el siglo XIX. El cubano Esteban Pichardo (1836) fue el primero en registrarla, según Corominas. En cambio, este autor en su Diccionario Crítico Etimológico no da fecha para la documentación de guagua 'autobús', aunque para él dicho término "es cubano desde luego", y opina que puede ser adaptación del inglés wagon, 'carruaje'. Los americanos, según nos informa, denominaban así los carruajes de transporte militar y un automóvil mediano empleado para el transporte gratuito de personas. Visto esto, es probable que, después de la guerra por la independencia de Cuba (1898), la inmediata ocupación americana y la posterior dependencia económica, en la isla antillana estuvieran en uso dicho tipo de vehículos.
En cuanto a Canarias, guagua 'autobús' no se registra en vocabularios de las dos primeras décadas del siglo XX. J. Reyes (1918), por ejemplo, que registra para Tenerife la expresión de guagua, no registra guagua como término equivalente a autobús. Más tarde, Luis y Agustín Millares, que sí lo hacen en Léxico de Gran Canaria (1924) y Cómo hablan los canarios (1932), hablan del origen americano del término. Según ellos, las guaguas eran entonces "los ómnibus, hoy automóviles, que explotan el servicio de transportes entre los dos puntos extremos de la población: el Puerto de la Luz y el barrio de San José". En Tenerife, según testimonio de personas mayores, todavía en los primeros años de la década de los cuarenta se empleaba la voz jardinera para designar al vehículo de transporte público, y fue por esos años cuando se extendió rápidamente, a partir de la capital, la voz guagua en lugar no de autobús, término que nunca se había usado, sino de jardinera