El mundo es de todos pero todos tenemos nuestro mundo.
Para Adán el paraiso es donde estaba Eva.
Amor no es mirarse el uno al otro, es mirar en la misma dirección.
El banquero es un señor que nos presta el paraguas cuando hace sol y nos lo exige cuando empieza a llover.
En la pelea se conoce al solado; solo en la victoria se conoce al caballero.
Por la calle del ya voy se va a la casa del nunca.
Nunca se da tanto como cuando se dan esperanzas.
El mundo no está amenazado por las malas personas, sino por aquellos que permiten la maldad.
Buscando el bien de nuestros semejantes encontraremos el nuestro.
Facilitar una buena acción es lo mismo que hacerla.
La religión no se lleva en las rodillas sino en el corazón.
Lo único que impide a Dios enviar un segundo diluvio es que el primero fue inutil.
Tenemos dos orejas y una sola boca, para hablar menos y escuchar mas.
Quien no comprende una mirada tampoco comprendera una larga explicación.
Mas vale una palabra a tiempo que cien a destiempo.
Un aburrido es uno que te priva de la soledad sin ofrecerte compañia.
Cuando veas un hombre bueno trata de imitarlo, cuando veas a uno malo examinate a ti mismo.
Nuestro carácter es el resultado de nuestra conducta.
Un cínico es un hombre que cuando huele flores busca un ataud en las proximidades.
La inspiración existe, pero debe encontrarte trabajando.
Es bueno ser importante, pero es mas importante ser bueno.
El cesped siempre crece mas verde al otro lado de la valla.
Pérdonaselo todo a quien nada se perdona a si mismo.
No encuentres la falta, encuentra el remedio.
Aunque a muchos les esta permitido pensar, algunos se lo ahorran.
Una era construye ciudades, una hora las destruye.
Al inteligente se le puede convencer, al tonto persuadir.
Un fanático es alguien que no puede cambiar de mentalidad y no quiere cambiar de tema.
Las batallas contra las mujeres son las unicas que se ganan huyendo.
Incluso en el trono mas alto uno se sienta sobre su propio culo.
El que se ahoga no repara en que se agarra.
Solo cuando el carro se ha roto muchos os dirán por donde debia haber pasado para no romperse.
La primera vez que me engañes la culpa será tuya, la segunda vez la culpa será mia.
Cuando hables procura que tus palabras sean mejores que el silencio.
Cuando apuntas con un dedo recuerda que otros 3 te apuntan a ti.
El sabio no dice lo que sabe y el necio no sabe lo que dice.
Una vez terminado el juego(la vida) el rey y el peon vuelven a la misma caja.
No son las cosas las que atormentan a los hombre sino la opinion que s tiene de ellas.