Discutir con los fanáticos de la trilogía clásica es imposible, jamás admitirán que nada que esté mínimamente relacionado con la nueva trilogía sea cierto o lógico. Es como hablar con la pared.
Discutir con los fanáticos de la trilogía clásica es imposible, jamás admitirán que nada que esté mínimamente relacionado con la nueva trilogía sea cierto o lógico. Es como hablar con la pared.