Aunque suene a argumento películero, el peligro de que La Tierra sea golpeada por un asteroide es muy real, por eso la NASA y la ESA están trabajando en conjunto en el proyecto Asteroid Impact Deflection Assessment (AIDA) que tiene como objetivo desviar un asteroide de su órbita, un experimento que serviría para recoger datos y estar preparados una vez llegue el caso de tener que hacerlo para salvar el planeta.
Se van a lanzar dos sondas, DART (Double Asteroid Redirection Test), que será la encargada de lanzar el proyectil que golpeará el asteroide, y AIM (Asteroid Impact Mission), que seguirá al asteroide para comprobar el efecto que ha tenido el impacto de DART.
El asteroide elegido para la misión es Didymoon, un pedrusco con forma de huevo. Las sondas serán lanzadas en Octubre de 2020, y se espera que llegen a Didymoon en Mayo del 2022.