El hilo oficial de la [MSI] Gaming Arena

un tripartito awesome cartero dream, hasta dupont tipearía su fedora desde su clase de 2º de primaria

Cada vez que un Protoss saca Dank Templars, muere un niño en África.

Tras una semana agotadora de trabajo y cansado también de darle vueltas a la cabeza, necesitaba despejarme, y para ello no hay nada mejor que salir a dar una vuelta al campo en una bonita noche de luna llena. El plan era visitar un territorio de búho real, que tiene su hogar en un peñón de fácil acceso a las afueras de Zujaira, una localidad que prácticamente es una barriada del pueblo de Santa fe. Ya había visitado la zona anteriormente, pero nunca conmigo mismo sino acompañado. Siempre tuvimos buenas experiencias por aquí, ya que los búhos, animales impresionante donde los haya, son relativamente fáciles de ver, o al menos de sentir aquí. Además, por las fechas en las que estamos (29/08/2015) , si la pareja ha conseguido sacar a sus pollitos adelante, estos seguramente se encuentren en el peñón haciendo sus característicos sonidos. En eso mismo iba yo pensando por el camino, escuchando a mi ultimo descubrimiento musical llamado “Rodriguez” y su disco “Cold fact”. Aparco en un carril cercano al territorio sobre las 23 horas y arranco un pequeño ascenso hacia el sitio. Llego al peñón a las 23:15, me siento y saco un pequeño taper con unas tajadas de melón que me iban a servir de cena. No se por que estos últimos días no tengo mucho apetito. Mientras estoy terminando me doy cuenta de lo increíblemente iluminado que esta el peñón, que refleja la luz de una de las lunas mas brillantes que había visto y también del concierto incansable de los grillos, los cuales parecía haber al menos uno en cada oliva (aquello esta en mitad de un olivar). El campo estaba lindo, como en cualquier noche, pero cosas un tanto extrañas comenzaron a suceder. Guardo el taper ya vacío en la mochila y justo tras cerrar esta y provocar el ruido de la cremallera, como si hubiera servido de interruptor para activar algo, absolutamente todos los grillos de mi alrededor dejaron de cantar. Sin pensar en nada, lo único que hago es mantenerme en estado de alerta, como esperando a que algo ocurriera. Cinco segundos de silencio absoluto y uno de los búhos del peñón, emite un sonido de alerta – pppgghhhhhhhhhh!! pppgghhhhhhhhhhh!! -. El campo estaba como tenso, incomodo, y mis instintos mas primitivos me hacían sentir de la misma manera. Miro alrededor para observar la zona y mi parte mas racional me recuerda que los animales se comportan de manera extraña cuando presagian un terremoto o algún fenómeno de esa índole. De pronto, un viento fuerte viene por mi espalda, haciendo susurrar a las hojas de los viejos olivos que tenían un tronco gordo y retorcido. Un polvo seco se levanta y tan rápido venía que llego a notar el picor de la arena en la nuca. Esto hace que me levante rápidamente para guardarme detrás del olivo que tenia justo al lado hasta que pase el vendaval. No duró mas de diez segundos el aire, entonces todo volvió al silencio absoluto otra vez. Empiezo a echar de menos los sonidos de la naturaleza, que al fin y al cabo son los que le hacen a uno no sentirse solo en mitad de la nada. Vuelvo a donde estaba sentado para recoger mi mochila, la cual me echo al hombro para moverme de allí, no sabia muy buen si para irme al coche y volver a casa o para cambiar de sitio con animo de comprobar si desde otro lugar podía entender mejor que estaba pasando. Fué antes de dar el primer paso y mirando hacia la pequeña caída que tenia bajo mis pies cuando vi algo que hizo que mi cara se volviese pálida. Mi sombra, que ya anteriormente me había llamado la atención por lo bien definida que estaba , tenía ahora otra silueta. La cabeza era alargada y de ninguna manera podría asociarse a la de un humano. Tras el escaso cuello se abrían unos hombros anchos y huesudos. Las manos con dedos largos y finos, al igual que los brazos. El torso se veía extremadamente raquítico. Mientras analizo, un tic comienza a vibrar en el parpado inferior derecho, que debía de estar abierto, dilatado y redondo como el satélite que proyectaba tan macabra figura en el suelo. Arranco a andar hacia el coche, raudo y con la imagen grabada a fuego en mi mente. Tras unos treinta metros me detengo para estudiarme y asegurarme de que no estoy perdiendo la cabeza. Como iba a volverme a casa después de haber visto aquello sin saber si era producto de mi imaginación? De si era real? Y si simplemente las circunstancias del momento me habían confundido? Decido volver para salir de, en ese momento, la preocupación de mi estado mental mas que del miedo. Llego al lugar y aparece la silueta de mi sombra, me reconozco en ella pero todavía me causaba una especie de terror, era como si desconfiara de ella. Solo un poco mas tranquilo, retomo ahora la vuelta hacia el coche. Curiosamente conforme me voy alejando del lugar los grillos van reanudando su canto, como si estuvieran esperando a que yo me fuera de allí. No tardo en llegar al aparcamiento, que se encontraba junto a una pequeña casa que tenía mas pinta de almacén que de vivienda. Hay algo que no va bien, vuelvo a tener esa sensación de que lo que sea va a suceder. El tic en el parpado es ahora mas fuerte y siento una gran presión en el pecho acompañado de unos pequeños pinchazos en el cráneo, que me recuerdan a los que padecía en mi niñez tras despertarme sudoroso de aquellas terribles pesadillas. Cuando estoy a unos metros del coche se enciende la luz interior y un escalofrío me recorre de punta a punta. Me acerco despacio a la puerta del conductor para ver, en los asientos traseros, la imagen mas demoníaca que jamas hubiera podido imaginar. Tumbado había alguien o algo, como medio enterrado en una especie de lodo que desprendía un vapor negro que impedía ver el cuerpo. Si pude ver por desgracia para mí, el rostro de la mas viva imagen de la crueldad de este mundo en una cara blanca, con ojos muertos y una mueca de sufrimiento eterno en la mandíbula.

Eché a correr hacia el pueblo, que se encontraba a no mas de cinco minutos a la máxima velocidad que me permitía la poca luz de la noche y el mal estado del carril de tierra. Al llegar a la primera calle del pueblo me encontré con una pareja joven, que se debió asustar al verme aparecer de la oscuridad, medio trastabillando y con la cara llena de lagrimas sucias por el polvo. Antes de siquiera poder explicarles nada vomité lo recién cenado, y ese es el último recuerdo que tengo antes de despertarme en mi casa, en mi propia cama, y a las siete de la mañana, es decir, seis horas mas tarde. Estoy aterrado. El coche no esta en su sitio, y tampoco se donde esta la mochila. Me he despertado con la ropa y la cara sucia. He hablado con mi madre y ella no me escuchó llegar, ya que se acostó pronto. Sin embargo si que me asegura que salí sobre las diez a ver los búhos, aunque ella se pensaba que iba con un amigo, ya que es lo que le dije para no preocuparle. Tengo la sensación de no haber dormido durante días y el parpado me tiembla durante unos segundos cada vez que recuerdo la cara de eso que había en el asiento trasero de mi coche…

#13 Es tan offtopic, que lo dejo.

entonces ni perfecta ni defensa.

si la hubieras visto no dirias lo mismo

#23 #25

Hydra vs Mines