"Sin noticias de Gurb" de Eduardo Mendoza.
Es el libro al que más odio le tengo. Es muy cortito, pero se me hizo ETERNO. Hace muchos años nos lo mandaron en clase de Lengua Castellana y Literatura en mi instituto (no recuerdo el curso ahora mismo).
Nos lo vendían como un buen libro de literatura juvenil, de un gran autor, que esta escrito en clave de humor y que había recibido algunos premios.
¡¡MENUDA BAZOFIA INMUNDA!!
Mira que los libros que mandan para leer en el instituto son malos con avaricia, pero este sin duda alguna se lleva la palma.
El argumento no tiene sentido alguno de principio a fin, aunque bien es cierto que siendo un libro de humor absurdo no tiene por qué tenerlo. Pero el gran problema de este libro es precisamente el humor absurdo.
Yo soy el primero que se rie con este tipo de humor, pero lo de este libro no solo no hacía gracia, sino que daba vergüenza ajena: una serie de gracietas repetitivas y cansinas que la primera vez bueno, tienen un pase y haces una mueca que podría llegar a llamarse sonrisa, la segunda la soportas, pero a partir de la tercera vez que el autor te viene con la misma porquería te dan ganas de matarlo.
Sinceramente, si en lugar de este libro nos hubieran mandado a leer un comic de Mortadelo y Filemón, la gente habría disfrutado mucho más, se habría reido algo e incluso habría aprendido más de literatura.
Es el único libro en toda mi vida que tras leerlo, lo he quemado. Si, literalmente, le prendí fuego para así no contribuir a que otra persona tuviera que sufrir semejante esperpento.
Era el primer libro que leía de Eduardo Mendoza y ni qué decir tiene que no he osado leer nada más suyo ni quiero hacerlo.
Un saludo