'En el camino', de Kerouac. Lo terminé hace unos días y he quedado prendado del estilo de este autor, así que conociéndome los próximos meses se los dedicaré a él casi al completo.
#5750 Has leido ya el de Justine o el infortunio de la virtud?
Y me he acordado de la película de animación sobre el marqués de Sade, creo que se llamaba Marquise pero ahora mismo me da pereza buscarlo en google...
#5763 No, y no está en la biblio. Solo tienen el de Juliette y menuda muerte: tres volúmenes sobre lo mismo. Antes me mato o mato a alguien. Reconozcámoslo: Sade cuando quiere es un coñazo. Aunque La filosofía en el tocador es magnífico.
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Ahora estoy leyendo Nietzsche y el círculo vicioso, de Pierre Klossowski. La mejor monografía que he visto sobre el bigotes.
Y he empezado y abandonado Micropolítica, de Guattari y Rolnik. En cierta medida este libro es como conocer a una persona que desde la distancia prudencial parece interesante hasta que te das cuenta de que es todo vacío, palabrería sin sustancia, totalmente prescindible: no te vas a perder nada entre sus páginas. Al principio todo parece demasiado bonito (esfuerzo sintético y radicalización práctica de los postulados de Mil Mesetas) pero pronto empieza a desplomarse el edificio: a medida que pasan las horas te empiezas a dar cuenta de que no te aporta nada, de que esa falsa ilusión inicial no va a entrar en escena, incluso te percatas de que olvidas aquello que páginas atrás pudiste compartir y aplaudir, pero sigues insistiendo y pasando páginas buscando esa quimera, hasta que de repente cierras el libro por la mitad y te vas sin mirar atrás.
También me ha pasado algo similar con Las lágrimas de Eros de Bataille, pero aquí ya con firmes motivos: atroz hegelianismo. La selección pictórica era bonita, eso sí.
Comencé la otra noche "El Invierno Del Mundo". Me está gustando más aún que el primero, la conexión que está haciendo con todos los personajes y como a la vez hace pequeños recordatorios del primer libro(lo leí en verano y siempre se agradece que refresque un poco el autor la memoria)
Acabé hace unos días Yo, robot, no me esperaba que fuera un conjunto de relatos cortos, no se por qué pensaba que era todo una misma historia, más típica xD
Me pongo ahora con Las aventuras del buen soldado Sveik de Jaroslav Hasek, solo he oído alabanzas de este libro, estoy deseando empezarlo 
Empecé ayer 'Lolita', de Nabokov, y aparte sigo con la saga de 'Geralt de Rivia' (concretamente con 'Tiempo de odio' ).
Me está sorprendiendo muy gratamente la serie de libros de Andrej Sapkowski, el mundo que rodea al brujo es absorvente (lo cogí para llenar el hueco que me dejó 'Canción de hielo y fuego' ). En cuanto al libro de Nabokov todavía no puedo decir mucho, solo llevo 20 pags xD
Me he leído hace poco "la institución imaginaria de la sociedad" de Castoriadis , pues estoy haciendo mi trabajo de final de grado acerca de los "imaginarios sociales". Para todo aquel que este interesado en el estudio de la realidad es un must (expresada aquí como construcción simbólica remitente a la naturaleza imaginativa del ser humano en tanto creador ex-nihilo, libre de cualquier determinación en su espontaneidad creativa). El autor crea su propia ontología a la hora de abordar el origen de las representaciones/significaciones en lo social, alejándose del determinismo materialista marxista y de las teorías funcionalistas y logicistas basadas en la determinación causal fundamentada en lo racional a la hora de crearlas. Aunque bebe del psicoanálisis se aleja de la radicalidad de freud, obstinado en verlo todo desde las pulsiones y lo puramente biológico, si que toma algunos de sus conceptos y sobre todo de lacan (real/imaginario/simbólico).
Libro tan interesante como desapercibido ha sido su autor y brillante su trabajo. Lo recomiendo
Yo me estoy leyendo la Trilogía de Nueva York, de Paul Auster, y voy por la segunda parte.
Al principio no me decía gran cosa, pero el rápido giro de acontecimientos me dejó a rebosar de intriga en la primera parte. Ahora estoy leyendo la segunda con ganas de sacar algo en claro, pues tengo entendido que al final todo está relacionado.. qué tensión :wow:
Recién acabada ‘La montaña mágica’, necesito lanzar mi pequeño testimonio, marcado por las cien últimas páginas, que he sentido estremecedoras y cargadas de desasosiego. El desasosiego del hechizo y del mundo mágico (¿qué es también el mundo de allá abajo?), por un lado; el del derrumbe de ese hechizo, por otro.
Se percibe la eternidad, la desvanecida conciencia temporal de los personajes, la muerte en vida en medio de muertes literales que no cesan. El relato parece no tener fin. Mann y su talento sobrehumano para continuar la narración y seguir sacando historias y personajes de la chistera da soporte a esa sensación. El tiempo como tema se materializa en el tiempo como motivo de desasosiego.
Luego están los sucesos últimos (lo que viene con el gramófono, la muerte invocada, los vientos de destrucción que borran toda sensatez… pelos de punta), eso que los grandilocuentes títulos de Mann llaman la otra cara de la “anestesia de los sentidos”, la “hipersensibilidad”.
Y de pronto, la caída. Por fin conocemos con certeza el instante de la historia que mira de frente la novela. Adiós a una época.
¿Son las tres obras magnas de Thomas Mann tres adioses?
Año 1924. Y lo que quedaba...
Choque de reyes , y entremedias me estoy leyendo El dragón, Rashomon y otros cuentos, de Ryunosuke Akutagawa
#5774 ¿Has leído La muerte en Venecia? ¿Y Confesiones del Felix Krull? Si es así, ¿La montaña mágica guarda similitudes con alguno de estos dos? ¿Con cuál dirías que más?
El caso es que La muerte en Venecia me gustó bastante y luego tiré con Felix Krull pero era un sopor y se quedó a medias. Tengo ganas de darle otra oportunidad al gran Mann pero me da miedo que esas 1000 paginazas se parezcan a Confesiones del estafador Felix Krull y acabe tirando el libro al suelo enfadado. Vendes muy bien el libro, tiv, pero ya he conocido a mucha gente que acaba abandonando La montaña mágica por la mitad, y claro xD.
#5779 ¿No te gustó lo de Felix Krull? LLevo un tiempo queriendo echarle un vistazo pero tus palabras no animan mucho xD
Acabo terminarme "La cuarta señal" de Jose Carlos Somoza, la verdad es que aunque me ha gustado a veces se me ha hecho un poco liosa y cuesta arriba. Eso sí, recuperamos un poco después del fiasco que me pareció Tetrameron
Y ahora vamos a seguir con "El Yermo" de Sergi Llauger que si es tan bueno como "Diario de un Zombi" será brutal 
#5779 No estará de más decir que yo también abandoné en mi momento 'La montaña', año y pico atrás, como abandoné a tantos otros (Tolstoi, Frisch, etc.), a los que voy reconquistando paso a paso, con tranquilidad. Mi novia, filóloga, tampocó se acabó la novela, aunque de eso hacen ya unos años. Es algo que forma parte de la magia de la montaña
A ti te la recomendaría como pocas, por todas los toneladas de historia de las ideas que Mann (el novelista erudito por excelencia) deposita en sus capítulos, con esas prodigiosas pugnas dialécticas (se me pegan los palabros...) entre el humanista ilustrado y el nihilista pro-medievo, razón y positivismo contra la apología de una violencia que todo lo debe barrer y purificar. Entre otras.
No creo que Mann suponga un desafío tan grande. Su 'Confesiones' no lo terminé no sé muy bien por qué (quizás como consecuencia de haber sido durante mucho tiempo un mal lector). A día de hoy la recuerdo entretenidísima, goffmaniana (5 años antes del estreno de Goffman), y una hermosa luz que me ilumina cuando de inventarse experiencias laborales se trata xD
A 'La muerte en Venecia' le espera una pronta relectura. De momento te diré que no se asemeja mucho a 'La montaña', aunque solo sea porque con la segunda no siempre hace falta tener al lado un diccionario.
Otro más por aquí que abandono "La montaña mágica" a la mitad, aunque espero retomarla en un futuro muy lejano. Recuerdo que había un personaje muy carismático llamado Giussepe Septembrini, me parece.
La montaña mágica y Muerte en Venecia la verdad es que tienen poco que ver desde mi punto de vista. Es que ya simplemente por la forma en que están estructuradas se pueden considerar géneros distintos.
Montaña mágica es un compendio de +1000 páginas sobre todo lo que Mann guardaba en esa cabecita suya. Se viste de novela y te la vende de esa forma, pero en el fondo las vivencias del protagonista son un mero vehículo para que Mann desarrolle todo un discurso de su forma de ver el mundo, la ciencia, la literatura, el ser humano y la vida en general. Hay un hilo conductor y pasan cosas, pero es lo de menos. En La montaña mágica lo que vas a encontrar son auténticos ensayos revestidos de conversaciones interminables entre los protagonistas. Me recordó bastante a los diálogos de Platón en cuanto a la presentación.
Muerte en Venecia es más novela. Poquitas páginas en las que no hay lugar para desarrollar toda esa verborrea. Brillante y va directa al grano.
Dios, tanta gente diciendo que no se pudo terminar La Montaña Mágica dan ganas de leérselo aunque solo sea por curiosidad.
Yo ahora estoy con Hambre, de Knut Hamsun. Impresionantes algunas situaciones y diálogos interiores, te dejan realmente descolocado o te sacan la carcajada.
Voy a empezar "El último pasajero", que se lo compró mi hermano hace un par de meses y se quedó por ahí olvidado. Me sabe mal tenerlo y no leerlo, a ver qué tal.
#5785 Ostia pues hace años que pienso en leerme "Hambre" (me parece que Bukowski lo recomendaba en alguno de sus relatos) pero después cuando voy a la librería nunca me acuerdo de buscarlo, y me pasa lo mismo con "La broma infinita" de David Foster Wallace.
Yo el viernes aproveché que había cobrado y me compré "Amigos absolutos" y "Un espía perfecto" de John Le Carré que para mí es una apuesta segura.
#5784 Hmm, yo diría que el objeto narrativo de Mann es un objeto distinto; no es un único individuo que puebla todas las páginas, ni el laberíntico tablero de folletín. Y pienso en 'Doktor Faustus', que es ni más ni menos que la historia de la Alemania del novecento, una monstruosidad, de esas cosas que se acometen pocas veces cada siglo. Creo que el objeto de 'La montaña mágica' no se le queda a la zaga: un mundo ya extinto, poblado por Joachims, Settembrinis, rusos distinguidos y toda esa fauna. No vemos trama de novela decimonónica porque aquí no hay otro siglo XIX que el representado por el interior del Berghof.
De Mann me sorprende su capacidad para armar el relato, disponiendo cuidadosamente los elementos para así detonarlos más tarde. Eso es lo que vi en 'Doktor Faustus', y de manera distinta en 'La montaña mágica'. Por ejemplo, las 150 primeras páginas, preámbulo y premisa genial a su primera reflexión (en tono ensayístico, muy cierto) sobre el tiempo:
Me di cuenta de que había asistido a una maniobra única que, por si fuera poco, conseguía expresar lo que yo tantas veces he sentido respecto al paso del tiempo. Esa cuestión seguirá presente hasta el final de la novela, de forma explícita (el Mann ensayista al comienzo de cada capítulo) o implícita (esa eternidad narrada de un mundo que permanece embotado). Temas hay tantos... Y su capacidad para entretener (ese signo novelístico) decae pocas veces, bien por las aventuras del sanatorio, bien por los personajes que todo lo avivan (Peeperkorn) o por las peripecias de Castorp (el viaje inicial por el bosque en el que está a punto de desfallecer). Es un viaje increíble.
