Renault se mantendrá en las primeras posiciones con más dificultad que hasta ahora.
BMW empieza a ser competivivo, al igual que Ferrari. McLaren ya se encuentra ligeramente por encima de Renault.
Honda puede o no resurgir, ya veremos, aunque no hay mucha esperanza.
Alonso puede ganar el mundial si tiene suerte, no rompe en ninguna carrera y consigue puntuaciones majas (4º puesto para arriba).
A raiz de todo esto, no hace falta ser un genio para descubrir que la presente temporada es más un mundial de neumáticos que de Formula1.