A lo largo de la historia numerosos artistas y genios han hecho uso de todo tipo de sustancias para ver incrementadas sus dotes artísticas y explorar su talento personal. Todos sabemos del consumo de opiáceos por parte de Lewis Carroll, el cual le permitió de algún modo escribir esa paranoia llamada Alicia en el País de las Maravillas, Goya y sus derivadas del opio 'pinturas negras' o el vasto número de estilos musicales que cultivaron los Beatles en dos años gracias al consumo de LSD.
Servidor, el cual encuentra en estos casos aislados las drogas como un genial combustible para la mente que ha permitido a la humanidad disfrutar de todas estas obras, se posiciona a su vez en contra del consumo reiterado de las mismas encontrándolo por ende aborrecible. Sin embargo, tras haberme sumido en mis veinte años de edad sin apenas haber hecho uso de ningún tipo de narcótico que no fuese el alcohol, necesito ver incrementadas mi creatividad y talento por circunstancias personales y recurro a vosotros para que me guiéis por la senda de los estupefacientes estrella a la hora de alcanzar fases insospechables de iluminación artística, esperando oír las que a vuestro juicio consideráis mejores sustancias para tal menester.
Gracias, un saludo.