Entre el jueves y el domingo los agentes de la Policía Municipal, de la Policía Nacional y de la Guardia Civil han realizado numerosos controles en las zonas de ocio y en parques para frenar las posibles represalias entre los pandilleros, tras los dos muertos y los apuñalados por peleas entre bandas del pasado fin de semana.
Este comienzo del plan de seguridad contra las bandas juveniles deja en Madrid numerosas armas blancas requisadas, decenas de identificaciones, varios detenidos y la inspección de muchas armerías, cuchillerías, ferreterías y tiendas susceptibles de vender armas blancas.
En varios de los casos los menores reconocieron que habían comprado el machete por internet y uno de ellos lo ocultaba debajo de la plataforma de su patinete eléctrico. Otros machetes estaban ocultos en alcantarillas o en contadores de luz. En el número 25 de la avenida de Orcasur de Usera se encontraron más armas blancas dentro de un cuarto de contadores de gas.