Qué es el flúor
El flúor (F) es un elemento químico perteneciente al grupo de los halógenos de bajo peso atómico y electronegativo. El fluoruro es la forma iónica del elemento F, el 13º elemento más abundante en la corteza terrestre. El fluoruro, debido a su carga negativa, se combina con cationes para formar compuestos estables como el fluoruro de calcio o de sodio (siendo éste último utilizado en pastas y enjuagues dentales).
La primera producción comercial de flúor fue para la bomba atómica del Proyecto Manhattan, en la obtención de hexafluoruro de uranio, empleado para la separación de isótopos de uranio. Este proceso se sigue empleando para aplicaciones de energía nuclear.
Dónde podemos encontrarlo
• Industria de vidrio y cerámica.
• Metalurgia del aluminio.
• Propelente de aerosoles y sistemas de refrigeración. (Aunque se utiliza cada vez menos por su daño a la capa de ozono).
• Pastas de dientes.
• Sales de flúor.
• Productos alimenticios.
• Agua potable. Estudios demuestran una concentración mayor de 1,5 mg/L (la permitida por la legislación actual) en el agua potable de lugares como las Islas Canarias, aunque donde realmente supone un gran problema es en Norteamérica (entre otros países), donde se fluorura el agua potable a fin de “mejorar” la salud dental.
Puede causar intoxicación
Siempre se ha pensado que cuando se consume en cantidades óptimas reduce el riesgo y la prevalencia de la caries dental, entre otros efectos positivos. Sin embargo, posteriores estudios permitieron concluir que el flúor producía manchas en el esmalte.
El flúor en forma iónica (F) muestra toxicidad para los seres humanos cuando se ingiere, dependiendo de la dosis y el tiempo que el individuo está expuesto. Ingestas elevadas de fluoruro de sodio (el utilizado en los productos bucales) causa ulceraciones en los labios y la boca y la mucosa gástrica, reacciones alérgicas de la piel, malestar gastrointestinal, debilidad, pérdida de apetito y dolor de cabeza. En casos extremos, la enfermedad facilita la rotura de los huesos y las articulaciones calcificadas, lo que dificulta la movilidad de las personas causando dolor severo.
La intoxicación se conoce como fluorosis y con frecuencia se produce en las zonas industriales o en zonas donde el agua contiene altos niveles del elemento. Pueden observarse los síntomas estéticos en la región oral, ya que los dientes comienzan a convertirse en blanco opaco, llegando en etapas más graves a producir manchas marrones y negras en los dientes. La utilización de un dentífrico fluorado se asocia con un aumento significativo de la concentración de flúor en la orina, sobretodo en niños.
¿Neurotóxico?
Los movimientos para remover el fluoruro de sodio de los suministros de agua potable de todo el mundo han ido creciendo en los últimos años, pero no ha sido hasta ahora cuando una de las revistas médicas más antiguas y respetadas del mundo, The Lancet, ha dado la alarma clasificando al fluoruro como neurotóxico, en la misma categoría que el arsénico, el plomo y el mercurio. Puedes encontrar el estudio aquí.
Imagen sacada de Hernán, R. (2011) ”FLÚOR UNA SUSTANCIA DE ALTO RIESGO”.
Aunque las iniciativas para acabar con la fluorización de las aguas han aumentado, éstas encuentras grandes dificultades debido a la gran carga emocional de la reputación de la que el fluoruro goza entre los profesionales de la odontología mainstream. Además de en la adición en el agua potable, el fluoruro puede ser encontrado en ciertas comidas, especialmente aquellas de marcas procesadas de té que podrían haber crecido en áreas contaminadas (puedes consultar esta lista aquí)
Si alguna vez te llamó la atención esas advertencias de PROHIBIDO INGERIR en las pastas de dientes, probablemente ya sabías cuán tóxico esta sustancia puede llegar a ser, especialmente en niños cuyo consumo no está bajo control.
El fluoruro añadido al suministro de agua se constata así como un veneno que se acumula en nuestros cuerpos y que puede manifestarse en problemas con el paso del tiempo, incluyendo la fluorosis dental o incluso problemas de salud mucho peores.
Los resultados coinciden con los encontrados por la Universidad de Harvard en 2013, que concluyó que los niños encontrados en lugares donde la fluorización del agua era muy elevada poseían un coeficiente intelectual “significativamente más bajo” que aquellas zonas con una concentración menor.
El fluoruro de sodio en el agua potable también ha sido relacionado con varios tipos de cáncer. Es funcionalmente diferente al fluoruro de calcio de origen natural comúnmente añadido a los suministros de agua potable y utilizado por los dentistas, quienes postulan su utilidad para la salud dental.
Cómo dejar de consumirlo
• Saliendo de la industria cárnica. Los animales criados para el consumo humano son alimentados con agua fluorada, por lo que indirectamente la estás consumiendo tú también.
• Esto afecta también a los alimentos vegetales que consumimos, por lo que se debe prescindir de la industria, tratando de obtener productos ecológicos donde se controlen los aditivos (sí, lo sé, no es fácil).
• Dejando atrás los dentríficos y enjuagues bucales donde se encuentre el flúor entre su composición. Podemos encontrar pastas de dientes libres de flúor como Earthpaste, Ecodent o preguntando en tu farmacia, aunque suelen tener un precio desorbitado.
• Adquiriendo un filtro para tu ducha.
Información adicional: (vídeo para vagos + Glándula Pineal):
Fuentes
Merlo, O. (2004). Flúor: actualización para el pediatra. Pediatría (Asunción). 31(1). Link
Varios (2013). Flúor: elemento potencialmente tóxico para plantas, animales y seres humanos. EDUCAmazônia 10(1). Link
Hernán, R. (2011) FLÚOR UNA SUSTANCIA DE ALTO RIESGO. Cap&Cua 5(1). Link
Varios (2009). ABSORCIÓN SISTÉMICA DE FLÚOR EN NIÑOS SECUNDARIAAL CEPILLADO CON DENTÍFRICO FLUORADO. Científica dental 6(2). Link
Varios (2015) El agua de consumo como fuente de exposición crónica a fluoruro en Tenerife: evaluación del riesgo. Nutrición hospitalaria 31(4) Link
Meyer, N. (2016) Fluoride Officially Classified as a Neurotoxin in One of World’s Most Prestigious Medical Journals. Link (basado en el estudio de The Lancet Neurology
Quitando con que realmente no parece existir un gran problema en el agua potable de Europa es recomendable reducir su consumo al mínimo, aunque solo sea por el esmalte. Resulta curioso que mercadona (único lugar que he mirado por ahora) no tenga una sola pasta de dientes libre de flúor. Lo único que he encontrado ha sido en una farmacia un botecito a 9€. Sé que mi salud vale más que eso pero JODER.
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