Quería compartir una breve reflexión con vosotros a raíz de haberme topado con muchos casos cercanos (incluyéndome yo mismo el primero) en los que personas que durante toda su vida han apoyado/votado a partidos de izquierdas, ahora ven como única opción sensata votar a lo que antes consideraban impensable: Vox y similares.
¿En qué tipo de sociedad estamos viviendo actualmente, que parece que todo partido de izquierdas o que se hace pasar por "progre" (como el PSOE de Sánchez) tiene que cumplir su agenda con los lobbies aferrados a la identidad de grupo como el feminismo, el independentismo, el animalismo y otros deleznables -ismos, para poder seguir recibiendo su chorreo de votos de masas de gente con poco o ningún criterio (y por ende, subvenciones y donativos venidos de vaya usted a saber dónde)?
Dejar de votar a Podemos y sentir verdadero asco por haberlo hecho anteriormente ha sido una experiencia similar a lo que sintió Neo cuando cogió la pastilla roja y se despertó untado en mierda: catársis.
Tan dura es esta situación, que hasta me duele en los huesos tener que decir que, por ejemplo, me alegro de tener al PP en el gobierno con todo este asunto del despropósito de Cataluña o con las políticas de inmigración que Podemos querían echar abajo para convertir a España en el prostíbulo de África.
Qué decepción. Al menos no estoy solo.