La Policía ya ha recibido la advertencia de sus equipos de inteligencia. El último salto a la valla de Melilla no era similar a los anteriores.
Las pateras procedentes de Argelia no dejan de incrementarse y la Policía española alerta de un enorme problema: "Nos han cortado las devoluciones". Argelia está respondiendo a la entrega del Sáhara a Marruecos con una mayor llegada de inmigrantes a España y, lo que acaba de percibir la Policía, no facilitando la repatriación. Los agentes no ocultan la situación: "En unos 20 días empezaremos a sacar de los CIE a gente sin control a las calles españolas".
Los CIE en los que se acoge a los inmigrantes que llegan a España en espera de un proceso de repatriación suelen mantener internas a estas personas cerca de 20 días. A partir de ahí, o hay auto de internamiento por parte del juez, o se les suele empezar a sacar de los CIE.
El máximo, en cualquier caso, es de 60 días dentro de los CIE.
Y pasados esos plazos, el destino debe ser o el país de origen del inmigrante ilegal, o la calle.
La Policía tiene claro lo que va a ocurrir en tres semanas: "Vamos a tener que soltar a los inmigrantes sin ningún control a las calles. Porque nos están bloqueando la colaboración para remitirlos a su país de origen".
El problema es serio. Y lo cierto es que, si siguen las relaciones bloqueadas entre Argelia y España, no habrá posibilidad de devolver a sus países a los inmigrantes ilegales argelinos.
Se trata del último gran problema al que se enfrenta España por culpa de la decisión de Pedro Sánchez de entregar sin contraprestación aparente el Sáhara a Marruecos. El otro es directamente el energético.
Y mientras tanto en España peleándonos por el machismo cuando estos inmigrantes de feminismo poco entienden.
Miedo da eso de que tendrán que dejar libres a todos esos que deben ser presos en Argelia, campando por España a sus anchas.