La gente está flipada.
Resulta que vivo en una zona donde hay locales y bares varios y la cochera de mi casa (privada, lógicamente) tiene un vado permanente, como es habitual. Pues bien, muchísimos viernes y sábados por la noche tengo que aguantar el drama de yo querer meter el coche en la cochera y no poder porque hay un coche obstaculizando el paso. Según como me coja el día y si llevo prisa o no, me molesto en entrar en algunos locales y preguntar si el coche es de alguien. Si no, llamada a la policía al canto.
Hoy ha sido uno de esos múltiples días en los que me he visto un coche ajeno plantado en toda la puerta de la cochera. Hoy ha sido uno de esos múltiples días que me he tirado un rato preguntando a la gente. Pues hoy ha sido también uno de esos días en los que, al no hallar al dueño o ningún conocido del mismo, me he visto obligado a llamar a la policía.
Por lo general, el dueño del coche viene entretanto llega la policía y le digo que se vaya echando leches que la he llamado y está al caer, o incluso cuando la policía ha llegado y ya le ha puesto la multa de rigor (aquélla con el plus de llamada a la grúa). Pues hoy, a pesar de que la poli ha tardado un buen rato, no he visto aparecer a nadie (y eso que he seguido preguntando).
Así pues, llega la policía, hace las fotos, llama a la grúa, pone la multa y esperamos. Al cuarto de hora llega la grúa y se lleva el coche. Se piran la policía y la grúa y, cuando estoy abriendo las puertas y me dispongo a meter el coche, me veo que viene un cani corriendo enfervorizado porque estaba viendo a lo lejos como la grúa se llevaba su coche.
Yo, a mi bola, seguí abriendo las puertas para meter el coche, pero tenía un presentimiento bastante vívido de que iban a surgir problemas. Así pues, cuando había abierto las puertas y me dirigía al coche (que tuve que aparcarlo a unos metros mientras esperaba a la grúa), me viene uno de esos canis y empieza la conversación:
- Oye, ¿has sido tú el que ha llamado a la grúa?; (él nunca lo hubiera escrito así si lo relatara, con tildes y eso xD), a lo que respondo:
- Sí, me he visto obligado a hacerlo porque me era imposible meter el coche.
Ya iba notando como en él no corrían aires de cordialidad... - Joder, pero qué dices, si lo tenía perfectamente aparcado.
Yo: No me digas eso porque cuando hay un coche invadiendo el vado mínimamente y mi coche cabe ni me molesto en llamar a la policía.
Entonces, veo que vienen dos canis más y sus respectivas novietas de palo preguntando qué había pasado, a lo que les responde el cani conductor:
- Se lo ha llevado la grúa porque el 'hijoputa' este ha llamado a la policía diciendo que estaba mal aparcado;
Y la conversación empieza a calentarse: - Oye, primero de todo, yo no te he faltado al respeto como para que me insultes, y segundo, que si tú dices que estaba bien aparcado, ve a la policía y se lo cuentas a ellos, que han hecho fotos.
Y salta una de las pseudocanis: - Dile que te la pague;
Y yo: :o_o: ¿Cómo?
Cani conductor: Sí, tú me la vas a pagar, porque yo paso de pagar una multa que me has puesto tú.
Yo: ¿Una multa que te he puesto yo? Pues espérate sentado.
De repente veo como los otros empiezan a acercarse demasiado, como a rodearme, y una de las tías diciendo:
- Fíjate, encima te vacila y todo el tío;
Que desencadenó la respuesta del cani conductor: - Venga, saca la pasta, que aquí pone que son 150€;
Y dice otro cani: - 150€ no porque mi padre tuvo que sacar el coche de la reserva de la grúa y le costó otros 150€ más.
El Cani conductor se quedó pensativo durante unos segundos, apuesto a que haciendo la suma mental: - Venga, dame la pasta ya o vas a tener un problema.
Me las olía putas, pero pasaba de darle ni un chavo a ese mierdas:
- Que no coño, que paso, no haber aparcado en el vado y punto.
Entonces, empiezo a alejarme en dirección al coche, dándoles a entender que había puesto el punto y final a la absurda conversación, y salta una de las niñatas diciendo: - Rájale Óscar, raja al 'hijoputa' ése;
Vuelvo la cabeza sin dejar de caminar y me veo al Cani conductor sacando una navaja de unos 10 centímetros de hoja y a los otros dos acercándose a mí, de forma amenazante, por cada lado, como para impedir que no saliera corriendo.
Entonces, le dije con voz titubeante y seria (porque no me lo esperaba, ingenuo de mí):
- ¿Qué vas a hacer con eso? (pregunta retórica).
Y noto cómo uno de los canis me agarra por detrás.
Llegada la historia a esta altura, esperaréis que me marque el pufo del siglo y cuente que me puse a dar patadas voladoras y hostias a mansalva, tirándome (sexualmente hablando) después a sus respectivas canis con un condón como calcetín y por vía anal. Pues no. Ni yo tengo ese poderío físico ni tanta valentía en una situación en la que me veía totalmente indefenso y contra niñatos que antes de que te des cuenta te han clavado la navaja. La suerte, ante tal situación adversa, no me fue esquiva y me salvaron por la campana un grupo de chavales de unos 30 años a los que conozco de vista. Estos empezaron a gritar a una distancia como de 15 metros ¿¿¡¡Qué coño estáis haciendo!!??, y uno de los canis (el que no me agarraba) se envalentonó, les dijo que si ellos también querían, y se llevó un sopapo en la cara de uno que ni se lo pensó y acabó semicaído.
Yo dí a Dios gracias, la verdad xD. Entonces, una de las canis empezó a insultar al chaval que le había dado el sopapo a su supuesto novio, y seguidamente empezó a darle leves empujones. El chaval le dijo tócame otra vez y me dará igual que seas mujer, y el que estaba en el suelo empezó a decir, medio llorando, medio encolerizado, que lo iba a denunciar y que se había quedado con su cara.
Yo, mientras tanto, ya me había zafado del que me agarraba (porque fue en socorro de su caniamigo también) y el que me amenazaba con la navaja se la guardó rápidamente y empezó a decirle algo a los otros chavales en plan venga, haya paz, vámonos. Entonces el grupo de chavales y los dos canis redomados (el hostiado y el agarrador por la espalda) empezaron a intercambiar alguna palabra más alta que otra, pero uno de los chavales que vinieron en mi socorro es un puto armario empotrado y toda tontería acabó cuando levantó la mano y los dos canis se escondieron amortajados, en su miedo de recibir una hostia de dimensiones bíblicas.
Así pues, sin mediar más palabra ni mirada conmigo, los canis se fueron, y yo me acerqué a agradecerles su ayuda, porque me había visto en un callejón sin salida en el que, por mucho que me intentase defender, mientras reaccionaba o no me iba a ver rajado y vapuleado fácilmente. Metí el coche en la cochera acto seguido y vine aquí a escribiros esta mierda de experiencia.
Y colorín colorado, este cuento se ha acabado.
Conclusión: asco de gentuza los niñatos de hoy en día. Me iban a clavar una puta navaja por nada, joder. Es que lo pienso y me hierve la sangre.
Resumen para vagos:
Voy a meter el coche en la cochera y me encuentro otro coche obstaculizando la entrada y, por tanto, infringiendo el vado permanente que luce en la misma. Viene la policía, lo multa, se lo lleva la grúa y, cuando se van y voy a meter el coche, vienen los integrantes del coche multado que, vaya por Dios, son canis, y me amenzan con clavarme una navaja si no les pagaba el importe de la multa. Casi nada.
Edit:
he editado intercambiando las comillas por cursivas, que las primeras no salían y molestaban la lectura.
